Sevilla |
El alcalde de Sevilla José Luis Sanz no ha superado la cuestión de confianza vinculada a la aprobación de los presupuestos. Los tres grupos de la oposición han votado en contra tal y como se preveía. El alcalde ha estado arropado por su equipo de gobierno y por alcaldes y cargos del PP de toda la provincia, también de la consejera de educación, del portavoz del PP en el Parlamento y del presidente del partido en Sevilla. Quien no ha estado ha sido el presidente de la Junta Juanma Moreno, aunque ha estado presente en el debate con los grupos.
Rechazada la cuestión de confianza, empieza la cuenta atrás para el nuevo presupuesto. El alcalde José Luis Sanz dice que es un día triste para la ciudad y que se pone en evidencia que los grupos de la oposición no son capaces de anteponer los intereses de los sevillanos a los suyos personales. Una unión que ha vuelto a calificar de pinza que hoy dice, sale más fortalecida y potente que nunca. Pero su compromiso asegura, será seguir trabajando para desbloquear la ciudad.
Desde Vox han reprochado al alcalde que no les deje entrar en el Gobierno y le han pedido que hable con Juanma Moreno para que pacte con su formación. La portavoz Cristina Peláez le ha tendido la mano y le ha pedido que sea valiente y haga posible un gobierno estable. En alusión a esa pinza a la que hace referencia el alcalde, Peláez ha dejado claro que no acordarán nada con el PSOE a los que ha tachado de traidores.
Por su parte la portavoz de Podemos-Izquierda Unida Susana Hornillo, le ha pedido al alcalde que baje de la nube y asegura que José Luis Sanz con este rechazo a su cuestión de confianza sale hoy más débil que nunca.
¿Qué va a hacer a partir de mañana después de salir derrotado?, es lo que le ha preguntado el portavoz del PSOE Antonio Muñoz al alcalde a quien le ha pedido que piense si el problema puede ser él. Muñoz le ha pedido que rectifique y que negocie con los grupos sin soberbia.
Dentro de 30 días vence el plazo para que se pueda presentar una moción de censura que no va a prosperar. PSOE y Podemos han adelantado que no van a pactar nada con la extrema derecha mientras que Vox ha adelantado que no negociará con partidos traidores, por lo que el presupuesto quedará aprobado automáticamente.