Los cargos que hay contra el club portugués son, según comunica la UEFA, disturbios de público, así como lanzamientos de bengalas y de objetos, mientras que sobre la entidad madrileña se investigará la cuestión de escaleras bloqueadas.
Este caso se analizará en la reunión del Comité de Control, Ética y Disciplina de la UEFA del próximo día 15. En el minuto 36 del partido los aficionados del Benfica ubicados en el primer y segundo anfiteatros del fondo norte del Vicente Calderón encendieron y lanzaron al menos cinco bengalas hacia abajo, a la grada con seguidores del Atlético y al césped, en el momento en el que el argentino Nico Gaitán marcó el 1-1 para el conjunto portugués. Algunas de ellas impactaron en varios seguidores del conjunto rojiblanco durante el minuto en el que estuvo detenido el juego, ya que el Atlético debía sacar de centro tras el 1-1 del Benfica.
Después del 1-2 del conjunto portugués, en el minuto 51, se encendió alguna bengala más en la zona ocupada por el público del equipo lisboeta, donde también hubo roturas de asientos. El Atlético de Madrid explicó el jueves que había tomado "las habituales medidas de seguridad y prevención" y que en los controles de acceso "se incautaron numerosas bengalas y otros objetos" a seguidores del club portugués, cuyo presidente, Luís Filipe Vieira, pidió disculpas por lo sucedido
Por incidentes similares el Comité de Control, Ética y Disciplina de la UEFA ha sancionado anteriormente con multas tanto a los clubes que actuaban como locales como a los visitantes y en ocasiones con cierres parciales de sus estadios si se suman otras infracciones.