Tener monedas antiguas en casa puede hacerte ganar una fortuna, y es que la compraventa de estas piezas es una gran oportunidad de inversión.
La numismática es la ciencia que estudia las monedas y algunas, como las pesetas, pueden alcanzar valor de miles de euros. Las de 5 pesetas, popularmente llamadas 'duros', son unas de las más cotizadas.
En concreto, las monedas de 5 pesetas de Franco de 1949 pueden llegar a valer entre 12.000 y 36.000 euros en las subastas numismáticas.
Hay un elemento en estas monedas que determinan su valor: las dos estrellas que tienen alrededor de la palabra 'cinco'. Tal y como se explica en web 'Coleccionista de Monedas' hay cinco combinaciones posibles de números en esas estrellas y en función de ello, su valor será más alto o más bajo: '19 49' (20 euros), '19 50' (20 euros), '19 51' (6.000 euros), '19 52' (36.000 euros) y 'E 51' (5 euros).
Las monedas del modelo '10 52' son tan codiciadas porque tan solo se conocen 14 ejemplares "en subastas numismáticas ha llegado a alcanzar un precio de 36.000 euros en 2011, aunque su precio más habitual es de unos 20.000 euros", señalan en la web 'Coleccionista de Monedas'.
Y, ¿qué hace tan especiales a estas monedas? Su alto valor se debe a que en 1951, cuando se estaba librando la guerra de Corea, el níquel se encareció y fabricar estas monedas suponía un gran desembolsos. Por ello, optaron por fundir los modelos que a día de hoy son las más valiosas: las monedas de '51 y 52'. Las pocas que quedaron se guardaron y por eso son tan cotizadas.
No obstante, tener esas monedas en casa no garantiza que vayas a recibir una fortuna ya que el estado en el que se encuentra la pieza es muy importante: "No puede tener el más mínimo desgaste, ni arañazos, y tiene que conservar el color y el brillo original", aclaran los expertos.