La supervivencia del cáncer de mama depende directamente del cribado y los controles médicos
El 10% de los casos están relacionados con la predisposición genética o los antecedentes familiares, aunque el perfil habitual responde a una acumulación de factores de riesgo
El Hospital Quirónsalud Málaga conmemora este martes 19 de octubre el Día Mundial contra el Cáncer de Mama, con el fin de ofrecer todo el apoyo y la información necesaria para pacientes y familias que sufren la enfermedad, así como fomentar la prevención y el diagnóstico precoz tan fundamental para su supervivencia. “Teniendo en cuenta ambos sexos, se trata de la neoplasia maligna más frecuente después del cáncer de pulmón en el mundo y después del rectal en España y, en el caso de las mujeres, es el primero en incidencia y la primera causa de muerte por cáncer; sin embargo, gracias a las revisiones médicas, las ecografías y mamografías y los tratamientos actuales, la enfermedad se supera o se cronifica en el 90% de los casos”, declara el doctor José Claudio Maañón, jefe de la Unidad Integral de Mama del Hospital Quirónsalud Málaga.
Según el especialista, el perfil habitual responde a una acumulación de factores de riesgo, pero “podríamos concretar que existe un riesgo acumulativo durante la vida de toda mujer con su pico máximo cerca de los 60 años”. Alrededor del 10% de todos los casos de cáncer de mama están relacionados con la predisposición genética o los antecedentes familiares, con variaciones por país y etnia. Las mutaciones más comunes de la línea germinal asociadas con el cáncer de mama se encuentran en los genes BRCA1 y BRCA2, con un riesgo promedio acumulativo de por vida de alrededor del 70%.
Múltiples factores de riesgo implicados
Otros factores de riesgo, algunos modificables y otros no, están presentes en cerca del 50% de los casos diagnosticados. El responsable del equipo de Unidad de Mama de Quirónsalud Málaga destaca múltiples factores implicados, tales como la edad avanzada, mutaciones genéticas (por ejemplo, BRCA1, BRCA2, PALB2, RAD51, etc.), antecedentes familiares de cáncer, especialmente de mama, ovario, páncreas y próstata, antecedentes personales de lesiones mamarias, la alta densidad mamaria, antecedentes de irradiación al tórax, diabetes tipo II, alto número total de ciclos menstruales de por vida, factores del embarazo tardío, bajo número de nacimientos o ningún embarazo, edad avanzada en el primer parto a término, lactancia materna corta o nula, obesidad, contenido de dieta alto en grasa y bajo en fibra, consumo de alcohol, fumar, exposición a hormonas esteroides, terapia hormonal para los síntomas climatéricos, anticonceptivos orales recientes o baja actividad física.
Disminución de la mortalidad gracias al diagnóstico precoz
“La mamografía ha demostrado, según diversos ensayos publicados, que puede reducir la muerte por cáncer de mama hasta un 20% gracias a un rápido diagnóstico; por ello, cualquier mujer mayor de 50 años, momento en el que la prevalencia aumenta, debe realizarse una mamografía una vez al año”, recalca la doctora Laura López, quien también insiste en que “no vale solo con realizar y analizar la mamografía, es importante explicar en la consulta la importancia de estar atenta a síntomas de alarma, como pueden ser las retracciones, las secreciones patológicas o la palpación de nódulos de nueva aparición, ya que la detección precoz es el principal factor para curar esta patología y ofrecer a la paciente la mejor calidad de vida”. Por otro lado, la bibliografía también arroja resultados prometedores con “al menos cuatro ensayos randomizados de quimio-prevención primaria, es decir, reducción en el riesgo de cáncer de mama utilizando anti-estrogénicos”.