SEMANA SANTA

Llenar el depósito sin vaciar la cartera: siete trucos para ahorrar gasolina en Semana Santa

Semana Santa: aproximadamente 15,8 millones de coches en carretera y un bolsillo que tiembla ante el precio de la gasolina. Pero no te preocupes, porque con algunos trucos bajo el capó, podrás recorrer las carreteras sin que el combustible se lleve todo tu presupuesto.

Miriam Méndez

Madrid |

Llenar el depósito sin vaciar la cartera: siete trucos para ahorrar gasolina en Semana Santa
Llenar el depósito sin vaciar la cartera: siete trucos para ahorrar gasolina en Semana Santa | Pixabay

La Dirección General de Tráfico prevé 15,8 millones de desplazamientos por carretera entre el viernes 11 y el lunes 21 de abril, cuando concluye la Operación Especial de Semana Santa. Y aunque el plan sea salir a desconectar, el precio del carburante se empeña en recordarnos lo contrario. El diésel ha registrado su primera subida desde febrero, y la gasolina encadena ya dos semanas consecutivas al alza, poniendo fin a una tregua que duró apenas unos meses.

Hasta octubre de 2024, los carburantes habían acumulado un descenso notable —un 8,9% en el caso de la gasolina y un 9,2% en el diésel—, pero desde las Navidades entraron en una nueva espiral de subidas que se mantiene en 2025. Aunque los precios aún están lejos de los históricos máximos del verano de 2022 (cuando la gasolina alcanzó los 2,141 €/l y el gasóleo los 2,1 €/l), llenar el depósito vuelve a doler.

Y como el precio de los combustibles no solo depende del petróleo, sino también de su cotización específica, los impuestos, los márgenes brutos y el coste de la materia prima, el conductor medio solo puede hacer una cosa: afinar la estrategia y buscar formas inteligentes de ahorrar cada kilómetro.

Repostar a la alemana: el truco europeo que ahorra hasta 20 euros por depósito

Si existe un truco para ahorrar en cada repostaje, ese es el famoso método "a la alemana", que ha conseguido revolucionar la forma en que muchos conductores llenan sus depósitos. Aunque pocos lo conocen, esta técnica permite ahorrar hasta 40 céntimos por litro de combustible, lo que se traduce en aproximadamente 20 euros por depósito.

El secreto radica en evitar las gasolineras situadas a lo largo de las autovías y autopistas. Según el análisis del Club de Automovilistas Alemanes (ADAC), las estaciones de servicio situadas en áreas más alejadas, como polígonos industriales o zonas con mayor competencia, ofrecen precios mucho más competitivos. Estos descuentos pueden llegar a 54 céntimos por litro en los casos más extremos. Además, repostar por la tarde, cuando las temperaturas son más bajas y los combustibles no se expanden tanto, también puede resultar en un pequeño ahorro.

Evita repostar en fin de semana y en vísperas de festivos

Además de la ubicación de la gasolinera, el día de la semana en que decides repostar puede marcar una diferencia importante en el precio final. Este patrón, que se repite semana tras semana, se debe a cómo las compañías ajustan sus precios en función de la demanda.

Según diversos estudios y portales especializados en consumo, los fines de semana, especialmente los viernes y sábados, y las vísperas de festivos son los momentos en los que el combustible alcanza sus precios más altos. La razón es simple: son los días en los que más personas llenan sus depósitos, bien para iniciar sus viajes o para moverse durante sus días libres. Esa alta demanda hace que las estaciones de servicio ajusten al alza sus tarifas por litro.

En cambio, los lunes y martes suelen registrar los precios más bajos, ya que es cuando se produce una menor actividad en las gasolineras y, por tanto, existe más margen para ofrecer tarifas algo más competitivas. Este ciclo se acentúa aún más en épocas de vacaciones, como la Semana Santa, donde los desplazamientos se concentran en días concretos.

Por eso, si tienes previsto iniciar tu viaje el viernes por la tarde, repostar el jueves o incluso el miércoles puede ayudarte a ahorrar unos cuantos euros. Y si eres de los que se queda en casa los primeros días y viaja más tarde, planifica el repostaje para principios de semana: lo agradecerás al ver la diferencia en el ticket.

Planifica tu ruta mediante apps y mapas

En tiempos de carburantes inestables, la improvisación en carretera puede salir cara. Por eso, antes de poner el coche en marcha, conviene trazar una ruta con cabeza... y con tecnología. Hoy en día, aplicaciones como Google Maps, Waze o incluso Here WeGo se han convertido en copilotos imprescindibles, no solo por su utilidad para evitar atascos o retenciones, sino porque también permiten optimizar el consumo de combustible.

Estas herramientas ofrecen rutas alternativas más eficientes, que evitan cuestas prolongadas, tráfico denso o desvíos innecesarios, todos ellos factores que disparan el gasto en gasolina. Algunas, como Waze, incluso incorporan alertas de radares, avisos de accidentes y previsiones de tráfico en tiempo real, lo que permite ajustar el trayecto sobre la marcha.

Además, muchas de estas apps te muestran las gasolineras más cercanas y sus precios actualizados, lo que te da la oportunidad de decidir dónde repostar sin pagar de más. Especialmente útil en trayectos largos o zonas rurales, donde las diferencias de precio pueden ser notables entre estaciones de servicio.

Otro consejo clave: si puedes elegir, apuesta por trayectos con menos pendientes o curvas pronunciadas. Las rutas de montaña o con desniveles implican más esfuerzo para el motor, y por tanto, mayor consumo. Un itinerario más largo pero llano puede resultar más económico al final del viaje.

Mantén tu vehículo a punto

¿Sabías que tu coche también necesita cuidados, como tú? Mantenerlo en buen estado no solo es clave para evitar sorpresas en el camino, sino también para que tu bolsillo no se resienta en cada repostaje. Empecemos por lo básico: los neumáticos. Si los tienes desinflados, tu coche tendrá que hacer un esfuerzo extra para avanzar, y eso significa más combustible gastado.

Pero no te detengas ahí. Revisa los niveles de aceite, el refrigerante y el líquido de frenos con regularidad. Estos son como las vitaminas para el motor: mantienen todo funcionando sin problemas. Y, si aún no lo has hecho, échale un ojo a los filtros de aire, porque un filtro sucio es como una respiración difícil para el motor. Si el aire no entra bien, el coche tendrá que trabajar más, y eso significa más consumo de combustible.

En definitiva, darle un cariño extra a tu coche con estas pequeñas revisiones hará que funcione como un reloj y te ayude a ahorrar en gasolina, además de prolongar su vida útil. ¡Tu coche y tu bolsillo te lo agradecerán!

Conduce de manera eficiente

Aunque la tecnología y la planificación de la ruta son esenciales para optimizar el consumo de combustible, uno de los factores más decisivos para ahorrar gasolina es cómo conduces. A menudo, pequeñas modificaciones en tu estilo de conducción pueden marcar una gran diferencia en el gasto final de combustible.

En primer lugar, mantener una velocidad constante es uno de los consejos más efectivos. Evita los acelerones y frenazos bruscos, ya que estos incrementan notablemente el consumo de gasolina. Si tu coche cuenta con control de crucero, ¡úsalo! Esta función permite mantener una velocidad uniforme sin la necesidad de estar constantemente acelerando, lo que resulta más eficiente para el motor y, por ende, para tu bolsillo.

Además, conducir con marchas largas siempre que sea posible es otro truco importante para reducir el gasto de combustible. Este tipo de conducción reduce las revoluciones del motor, lo que significa que no estarás forzando el motor innecesariamente. Sin embargo, asegúrate de cambiar de marcha cuando las condiciones del tráfico o del terreno lo requieran, como en subidas pronunciadas o en tráfico lento.

Otro enemigo silencioso del ahorro es el uso excesivo del aire acondicionado. Aunque puede ser tentador ponerlo a toda potencia en un día caluroso, debes saber que este sistema aumenta el consumo de gasolina. Cuando las temperaturas no sean extremas, considera abrir las ventanas o usar el ventilador, ya que el aire acondicionado puede elevar el consumo de combustible hasta un 10-20% en condiciones de calor.

Finalmente, uno de los trucos más sencillos pero efectivos para evitar el consumo innecesario de combustible es apagar el motor durante paradas largas. Si vas a estar detenido por más de 30 segundos, como en un semáforo o en una pausa, apaga el motor. Aunque los vehículos modernos están diseñados para arrancar de manera eficiente, este simple gesto puede reducir el consumo hasta un 5% en trayectos largos.

Evita el peso extra y la resistencia aerodinámica

Aunque no siempre se presta atención, cada kilo extra en el coche tiene un impacto directo en el consumo de gasolina. Si estás preparando tu vehículo para un viaje largo en Semana Santa, es clave recordar que menos es más cuando se trata de cargar el coche.

Esto se debe a que el peso adicional aumenta la resistencia al movimiento del vehículo, lo que significa que el motor tiene que trabajar más para mantener una velocidad constante. Esto se traduce en un consumo más alto de combustible. Por eso, es recomendable llevar solo lo imprescindible y evitar el exceso de equipaje que solo hará que el coche sea más pesado de lo necesario.

Pero no solo el peso en sí afecta al gasto de gasolina, también la resistencia aerodinámica. Si decides llevar bicicletas en el portón trasero o cargar la baca en el techo, ten en cuenta que estos elementos aumentan significativamente la resistencia del aire. Al estar en el exterior, disminuyen la eficiencia aerodinámica del vehículo, lo que obliga al motor a gastar más para mantener la misma velocidad. En los coches, la resistencia aerodinámica aumenta en proporción a la velocidad, por lo que si vas a conducir por autovías o en trayectos largos, la diferencia en el consumo de combustible será aún más notable.

Por eso, si no necesitas llevar estos accesorios, lo mejor es desmontarlos antes de salir. Quitar la baca o las bicicletas puede reducir el consumo de combustible entre un 5% y un 10%, especialmente en viajes largos. Además, el coche se desplazará con mayor facilidad y seguridad.

Compara precios antes de repostar

Es común que, cuando estamos de viaje, lo primero que hacemos es parar en la gasolinera más cercana sin pensarlo dos veces. Sin embargo, hacerlo podría costarte más de lo que piensas. Los precios del combustible pueden variar significativamente entre estaciones, incluso si son de la misma cadena o marca, y esta diferencia puede marcar la diferencia en tu bolsillo.

Por eso, antes de repostar, tómate un momento para comparar precios. Algunas aplicaciones móviles comoGasAll o GasBuddy permiten conocer en tiempo real los precios de la gasolina en las estaciones cercanas a tu ruta, dándote la posibilidad de tomar decisiones informadas y no caer en la trampa de la gasolinera más próxima solo porque es la más visible.

Además, si tu viaje te lleva por varias provincias o comunidades autónomas, ten en cuenta que el precio del combustible puede variar de una región a otra debido a factores como impuestos o la competencia local. Tomarte unos minutos para comprobar las estaciones en tu itinerario puede ahorrarte varios euros a lo largo del viaje.

Las gasolineras más baratas para ahorrar esta Semana Santa

Si vas a viajar durante la Semana Santa, el precio de la gasolina será un factor clave en tu planificación. Para evitar que el coste de los repostajes arruine tu presupuesto, es crucial conocer cuáles son las gasolineras más económicas a lo largo de tu ruta. En ciudades como Madrid, Barcelona, Sevilla o Valencia, hay estaciones de servicio que destacan por sus precios más bajos.

  • Madrid: en Arganda del Rey, cerca de la A3, puedes encontrar gasolina por 1,274 €/l y diésel a 1,184 €/l. Si estás dentro del municipio de la capital, las zonas cercanas a Mercamadrid y Villa de Vallecas ofrecen gasolina a 1,309 €/l.
  • Barcelona: las gasolineras más baratas se encuentran en L'Hospitalet de Llobregat y Sant Adrià del Besòs, donde el precio de la gasolina varía entre 1,269 €/l y 1,279 €/l. El diésel, por su parte, se encuentra en torno a los 1,184 €/l.
  • Sevilla: en el polígono de Santa Clara, el precio del diésel ronda los 1,215 €/l, mientras que la gasolina se sitúa en 1,335 €/l.
  • Valencia: las gasolineras cercanas a la ciudad de Valencia tienen gasolina a 1,294 €/l y diésel a 1,199 €/l.
  • Bilbao: en Bilbao, los precios son algo más altos, con el diésel rondando los 1,245 €/l y la gasolina en torno a los 1,335 €/l.