Agarrado a su fortín del Carlos Tartiere, el Real Oviedo se colocó segundo en la tabla después de sumar se sexta victoria en el municipal ovetense que le convierte en el equipo con mejores números como local de la categoría y ahora queda a expensas de mejorar el rendimiento como visitante para adquirir de forma definitiva la etiqueta de aspirante al ascenso directo, aunque sigue muy lejos del intratable Racing de Santander que no cede en la cabeza.
El choque ante el Tenerife no tuvo mucha historia. En 15 minutos el equipo de Javi Calleja mandaba por 2-0 y cuando los canarios tuvieron la opción de meterse en el encuentro, Aarón Escandell detuvo la pena máxima lanzada por Luismi Cruz para salvar la ventaja al descanso. El 3-0 de Jaime Seoane ya finiquitó el duelo y el tanto tinerfeñista no pasó de una anécdota.
Santi Cazorla sigue siendo el líder del juego del equipo y firmó otra actuación impecable secundado por una segunda unidad que está dando la cara como demostraron Lucas Ahijado o Jaime Vázquez, que mantiene una línea ascendente en cada encuentro que disputa.
Las únicos lunares del encuentro fueron la lesión de Alemao, que tuve que pedir el cambio por culpa de un golpe en la zona de la cadera y queda pendiente de evolución para ver si puede viajar a Elche y Dani Calvo que vio la quinta amarilla y se perderá la cita por sanción. El equipo tiene dos días libres y volverá a los entrenamientos el miércoles a las 10.30 horas en El Requexón.