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Repsol alertó de un fallo que paró por completo una refinería cinco días antes del apagón

ondacero.es

Madrid |

Repsol alertó de un fallo que paró por completo una refinería cinco días antes del apagón | Repsol

Cinco días antes del histórico apagón que este lunes dejó a más de la mitad del país sin suministro eléctrico, Repsol ya había detectado problemas graves en el sistema eléctrico nacional. Según ha revelado el periódico El Mundo, la compañía energética informó el pasado 24 de abril a sus principales clientes de una “situación de fuerza mayor” en su refinería de Cartagena, tras un fallo eléctrico "ajeno a la planta" que obligó a detener por completo su actividad.

En el comunicado, redactado en inglés y fechado el 24 de abril, Repsol explica que "el 22 de abril de 2025, la refinería de nuestro proveedor experimentó un cierre inesperado debido a problemas técnicos con el suministro eléctrico", calificando el incidente como “circunstancias fuera de su control”. Como consecuencia, la empresa activó la cláusula de "Force Majeure", suspendiendo todas las entregas de producto hasta nueva orden.

El texto, al que ha tenido acceso El Mundo, destaca que Repsol estaba "haciendo esfuerzos razonables para minimizar el impacto de la interrupción en la producción" y prometía mantener informados a sus clientes de cualquier novedad.

Este episodio ha cobrado especial relevancia tras el apagón registrado este lunes, cuando, a las 12:33 horas, se produjo la desaparición súbita de 15 gigavatios de generación eléctrica, el 60 % de la demanda nacional en ese momento, en apenas cinco segundos, provocando el colapso parcial de la red y afectando a infraestructuras críticas en todo el país.

Aunque el Gobierno aún investiga las causas del apagón y no ha establecido una relación directa entre el fallo detectado en Cartagena y el colapso nacional, la revelación de El Mundo pone de manifiesto que en los días previos ya se habían registrado incidentes significativos en el sistema eléctrico español.

La refinería de Cartagena es una de las instalaciones más importantes de Repsol y del país, y su parada obligada, aunque no trascendió públicamente en su momento, evidencia la fragilidad del suministro energético y posibles problemas estructurales en las interconexiones eléctricas con otros países.