El Sporting de Orlegi venció y convenció. Desde primera hora de la tarde se notaba en el ambiente la ilusión de una afición volcada con la nueva propiedad tras poner fin, 28 años después, a la 'etapa Fernández', tan mediocre en lo deportivo.
Alejandro Irarragorri, acompañado de su familia, de un buen número de empresarios a los que invitó al palco, y de la Alcaldesa de Gijón, Ana González, se dio un auténtico baño de masas a lo largo de toda la Avenida de El Molinón y dentro del propio estadio. El empresario mexicano no dudó en acudir a pie al partido, y no puso ni una sola pega a la hora de firmar autógrafos y hacerse fotos con los aficionados. Previamente, en la tarde del viernes, atendió a los medios de comunicación a pie de campo.
Ya durante el partido, el equipo no le defraudó. Abrió la lata en la primera ocasión claro que tuvo, tras gran jugada de Cote culminada con finura con Djurdjevic. En el segundo tiempo los de Abelardo remataron la faena con los tantos de Izquierdoz (tras otro servicio preciso de falta de Cote), Djuka de nuevo, que porfió por un balón hasta el final tras pelotazo de Mariño, y Aitor García, que se quedó solo ante el portero y definió perfectamente tras ganar Campuzano un balón por alto.
Goleada, y éxtasis absoluto en el estadio, con más de 19.000 espectadores en las gradas. El Sporting volverá a jugar en casa el sábado, a la misma hora (17:30 horas) ante el Burgos de Michu, Saúl Berjón y Gaspar Campos.
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