La noche electoral del 12M dejó un claro vencedor en las elecciones autonómicas de Cataluña. Salvador Illa, líder del PSC, logró más de 800.000 votos y obtuvo 42 escaños que le permitirán presentarse a una investidura para ser president de la Generalitat.
El electorado situó en segundo lugar a Carles Puigdemont y su formación, Junts+, con 36 escaños. Se convirtió en la primera fuerza independentista tras el batacazo de ERC, que perdió 13 escaños, y de la CUP que obtuvo 5 diputados menos que en 2021.
Por su parte, el Partido Popular liderado por Alejandro Fernández fue el partido que más creció. El líder popular quintuplicó su resultado de los anteriores comicios y logró hacerse con 15 diputados. Sin embargo, todos estos resultados no dejan un vencedor absoluto con una opción clara de gobierno, ya que, las sumas entre formaciones son justas o implican movimientos políticos a nivel nacional.
Un tripartido liderado por el PSC, con Salvador Illa al frente, y con el apoyo de ERC y Comuns Sumar, es una de las opciones que ha dejado el escrutinio del 12M. La suma de estos tres partidos de izquierdas sería suficiente para lograr la mayoría absoluta de 68 escaños que marca el Parlament.
Sin embargo, Pere Aragonès ya dejó claro en la noche electoral, y después de conocer el batacazo de su partido, que "trabajará desde la oposición". Estas palabras del actual president de la Generalitat hacen pensar que no apoyará a Salvador Illa y prácticamente podría descartar la opción del tripartito.
La segunda opción que se plantea tras los resultados de las elecciones en Cataluña es que Carles Puigdemont sea el que se presente para ser investido como president de la Geneeralitat. El líder de Junts ha anunciado este lunes que así lo hará y que establecerá contactos con ERC para lograr una "mayoría coherente".
Puigdemont ha dejado claro que quiere evitar una repetición electoral que "haría mucho daño a Cataluña" y eso pasa por formar un Gobierno independentista con el apoyo de Esquerra Republicana. No obstante, la suma de ambas formaciones no lograrían la mayoría absoluta, y necesitaría el apoyo de otra formación como la CUP o la abstención del PSC.
El otro escenario que se presenta factible tras la noche electoral del 12M es una repetición de las elecciones en Cataluña. La negativa de Junts para apoyar una investidura de Salvador Illa y el 'no' del PSC para hacer presidente a Carles Puigdemont podría propiciar un bloqueo político que llevaría a unos nuevos comicios.
Además, esta situación puede implicar movimientos en la política nacional, ya que, Carles Puigdemont podría quitar el apoyo de sus siete diputados en el Congreso a Pedro Sánchez. Por ello, el líder del PP catalán, Alejandro Fernández, afirma en declaraciones a Más de uno que "la agenda de Illa estará marcada por Pedro Sánchez".
Todos estos movimientos y negociaciones comenzarán en los próximos días, ya que, la fecha límite para formar el Parlament de Cataluña es el próximo 10 de junio. Después de esto llegaría el momento de presentar un candidato a la investidura, como máximo, hasta el 25 de junio. En caso de que no haya un presidente al frente del Govern, podría haber una repetición electoral pasado el verano.