El mal estado de las vías por las que transcurre el tren, que aún no están electrificadas, y las continuas incidencias que acostumbran a retrasar los horarios, han motivado que la sociedad extremeña haya decidido mostrar su descontento con esta protesta.
Guillermo Fernández Vara, actual presidente de Extremadura, ha asegurado que esta marcha "no va contra nadie", posición a la que se ha sumado su máximo rival político, José Antonio Monago, quien a su vez ha explicado que la jornada de hoy servirá "de toque de atención a todo el mundo".
Tras la marcha está previsto la lectura de un manifiesto, acompañada de un cierre musical.