Madrid | 16.03.2021 14:02
Primer revés de Pablo Iglesias en su campaña madrileña. Íñigo Errejón le dice no a ir coaligados. Si acaso está dispuesto a dialogar después de las elecciones.
Revestida de estrategia política, Errejón sirve la venganza en plato frío. El amigo con cara de niño del que Pablo prescindió prefiere que las urnas pongan las cosas en su sitio. A ver si Errejón repite o aumenta los 20 escaños y Podemos, como auguran las encuestas, se convierte en aún más irrelevante en Madrid o incluso extraparlamentario.
Hablarán las urnas y entonces podrán negociar según la fuerza de cada uno. No en vano hace sólo un año, Pablo sostenía respecto a Errejón que cuando te separas, las cosas están mucho mejor. Pues Íñigo ha tomado buena nota.