Madrid | 03.02.2022 07:45
1.- ¿Qué ha sido más insólito de la reforma laboral, haber logrado el consenso de la patronal y los sindicatos o haber puesto de acuerdo a Nadia Calviño y Yolanda Díaz?
2.- Tal como ha quedado la reforma sin reforma, ¿no sería lo lógico que la apoyara quien la rechaza, o sea el PP, y que la rechazaran quienes la promueven, o sea el PSOE y Unidas Podemos?
3.- Los nacionalistas votarán en contra, fracturando el bloque de la investidura. ¿Es un problema para Sánchez, o más bien es un problema para los propios soberanistas? El presidente del Gobierno exhibe su versatilidad. Y sabe que ERC, PNV y Bildu regresarán al redil.
4.- La reforma sale por decreto. ¿Qué problema tiene Sánchez con la separación de poderes? El Ejecutivo injiere en la Justicia a su antojo igual que hace con el poder legislativo, restringiendo el Parlamento a una cámara burocrática de convalidación.
5.- ¿No os parece insólito que la manera de resolver el conflicto medioambiental sea cambiar las etiquetas al gas y a la energía nuclear? Son lo que son, pero la Comisión Europea los eleva al rango nominal de verdes para homologarlos como tolereables.
6.- ¿No sería lo mismo decir que el vehículo ultra-contaminante de Rafa es en realidad un coche de caballos?
7.- ¿No es extraordinario que el uso de la mascarilla en exteriores decaiga unas horas después de haber sido aprobado en el Parlamento? Lo reclaman muchas comunidades, amparándose en la precariedad de los argumentos científicos.
Y MEDIA
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