Rosa era la madrina de un bautizo en Luxemburgo y le perdieron las maletas. Como estaba todo cerrado le tuvieron que dejar ropa. “Notaba que todo el mundo me miraba, porque el traje me quedaba corto”.
Una auténtica aventura vivió Remedios con su familia en Jordania. Decidieron ir de excursión a Arabia Saudí caminando por el desierto. Después de quedarse sin agua, hacer autoestop y conseguir llegar a la frontera, los soldados no les dejaron entrar en el país. “Pero les hizo tanta gracia nuestra excursión que se hicieron una foto con nosotros”.
Buscando un restaurante en Estambul, Antonio se encontró con un mercader de alfombras que iba todos los años a un pueblo de Badajoz a vender su mercancía.
Y Natalia se convirtió en la protagonista de su viaje a China. En todas las excursiones que iban los chinos le hacían fotos y no sabían porque. “Llegamos a la conclusión de que nunca habían visto un occidental”.
Paco se perdió intentando llegar a Las Vegas. “Pusimos el navegador y nos llevó hasta una reserva india preciosa”. Además, para más inri pincharon una rueda y terminaron durmiendo en un motel de carretera.