El indulto de Rubén Amón: El peaatón
Querido peatón, me dirijo a ti —en tu- de-sa-sosie-go. Y en reconocimiento la ginkana que protagonizas cada día cuando sales de casa. Antes te jugabas la vida cuando cruzabas una calle. Y te la sigues jugando ahora, porque los pasos de cebra son en España una bonita, geométrica. Alegoría funeraria de cal.
