Una de las incógnitas alrededor del coronavirus era por qué las personas mayores podían sufrirlo de mayor gravedad que los jóvenes. Charlamos con la directora Científica del CNIO, el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas, María Blasco, que nos indica que la clave podría estar en los telómeros, los extremos de los cromosomas: "Los pacientes de covid que más han sufrido tenían los telómeros más cortos".
Y es que estas regiones del ADN son fundamentales para la regeneración pulmonar y tener los telómeros más cortos puede retrasar esto, dando como resultado "una mayor posibilidad de sufrir un caso de coronavirus más grave y con mayores secuelas, al dejarnos más expuestos".
Entre algunas investigaciones, Blasco explica el caso de un tipo de células embrionarias, ya que pueden dar lugar a un organismo entero, tienen telómeros largos y pueden ser inmortales. No obstante, duran muy poco tiempo en este estado y se convierten en especializadas. "Hay que conseguir que se mantengan con estas características para usarlas en la medicina", reflexiona.
Otro de los misterios alrededor de este virus es su origen. La directora científica del CNIO reconoce que ya se sabe que este se produjo por un murciélago y fue el pangolín el que actuó como intermediario entre este y el ser humano. Además, añade que "conocer esto puede significar descubrir el inicio de otras enfermedades".