Jornet a los 5 años subió a la altura más alta del Pirineo, el Aneto. Ahora, con 24 años, se ha convertido en un atleta de altura que ha ganado grandes competiciones. Cada año recorre 7.000 km, 6.000 con esquís y 1.000 en bicicleta. Explica que estar en la naturaleza le hace sentir vivo, ‘no entiendo que a la gente le guste vivir en una gran ciudad’.
Cree que el deporte es egoísta, como cita en la primera página de su libro, añade que ‘el egoísmo es creer en uno mismo, saber lo que te gusta y luchar por ello’. Sobre su vida privada, cuenta que pasa poco tiempo en casa y que es difícil encontrar una pareja debido a los continuados viajes que realiza. Explica que de pequeño quería ser ‘contador de lagos’ porque quería estar en contacto con la naturaleza, al final he tenido otro tipo de contacto.
Tiene varios proyectos que va a realizar en los próximos años, como culminar en las Cimas de Europa o probar en el Himalaya. Tras todos los retos conseguidos cuenta que ‘el sabor de la victoria es adictivo, pero te cansas rápido de ello’, añade que a él le gusta ser muy competitivo y que no le basta con participar.