El Congreso de los Diputados aprobó el pasado 15 de diciembre una nueva ley del aborto elaborada por el Ministerio de Igualdad con los votos en contra del Partido Popular, Vox y Ciudadanos. La ley de Salud Sexual y Reproductiva de la ministra Irene Montero ha pasado su penúltimo trámite legislativo con el debate y votación en el Congreso, y será llevada al Senado para su ratificación.
La Ley Orgánica 2/2010 de Salud Sexual y Reproductiva y de Interrupción Voluntaria del Embarazo contempla los siguientes plazos:
Con la ley de 2010, las chicas de 16 y 17 años podían interrumpir el embarazo por decisión propia, sin que fuera necesario ningún consentimiento adicional, aunque al menos uno de los representantes legales o tutores de las joven tenía que ser informado.
Sin embargo, en 2015 el Partido Popular modificó la norma para que todas las menores de 18 años necesiten el consentimiento de sus padres o representantes legales para poder realizar la intervención.
No obstante, si la menor justifica fundadamente que esto le provocará un conflicto grave, manifestado en el peligro cierto de violencia intrafamiliar, amenazas, coacciones, malos tratos, o se produzca una situación de desarraigo o desamparo entonces la decisión la tomará un juez.