Hasta 440 personas perdieron la vida en las carreteras entre enero y mayo de este año, lo que supone la cifra más alta de este periodo desde 2016. Los datos de la DGT indican que se trata de los cinco primeros meses del año más tráficos desde aquel año, cuando se registraron 443 víctimas mortales.
Las cifras preocupan, sobre todo a las puertas de un verano en el que habrá millones de desplazamientos por las vías de nuestro país. Por ello, con el fin de garantizar la seguridad y evitar los siniestros, la DGT cuenta con 780 radares fijos y 545 móviles, así como 92 velocímetros, 12 helicópteros, 39 drones, 15 furgonetas y 232 cámaras pendientes de infracciones de conductores.
Precisamente, el exceso de velocidad es una de las infracciones más habituales de los conductores en España, y por tanto una de las causas más frecuentes de accidentes. Para garantizar más seguridad, la DGT ha ajustado el límite de los radares.
Si antes todo se regía por la 'regla del 5 y el 7', esto es, había un margen de entre 5 y 7 kilómetros por hora con respecto a la cantidad marcada en el radar, ahora pasan a la 'regla del 3 y el 5'.
Así, a partir de este mes de junio, el margen de error se va a los 3 kilómetros por hora en radares fijos y carreteras donde la velocidad máxima permitida no exceda los 100 km/h. En el caso de los radares móviles, el límite queda en 5 km/h en dichas vías.