8 de mayo de 2025
La variante Ómicron y sus linajes BA.5 y BQ.1.1 están provocando un aumento de casos de coronavirus. Además, aunque son menos virulentas, se han mostrado más transmisibles por lo que los expertos han alertado de la llegada de la que sería la octava ola de coronavirus, que amenaza las Navidades.
Según los últimos datos epidemiológicos publicados por el Ministerio de Sanidad sobre la situación de la pandemia del coronavirus en España, la incidencia acumulada a 14 días en mayores de 60 años se sitúa en los 220,14 casos por cada 100.000 habitantes.
Asimismo, se han notificado 23.753 nuevos casos de coronavirus, por lo que el total de contagios desde que arrancó la pandemia en marzo de 2020, ha ascendido a los 13.511.768. En cuanto al total de fallecidos, se ha elevado a los 115.078 muertos tras sumarse 80 nuevas defunciones.
Por su parte, actualmente hay un 2,70% de camas ocupadas en los hospitales por Covid-19 y en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) un 2,15%.
Por ello, tanto desde el Ministerio dirigido por Carolina Darias, como desde otras instituciones, los expertos recuerdan la importancia de la vacunación para protegerse contra las diversas variantes. Además, recuerdan que se puede vacunar contra el Covid-19 a la vez que de la gripe.
Según Sanidad, de las 109.197.625 dosis entregadas, se han administrado 98.948.747 dosis y 40.662.089 personas han recibido la pauta completa.
Por su parte, un estudio elaborado por científicos de la Universidad King's College de Londres y publicado en la revista 'The Lancet', ha descubierto que la duración de los síntomas de la Covid-19 cambia en función de la variante.
En concreto, las personas infectadas por la variante Ómicron suelen presentar síntomas unos 4,4 días. Es decir, un periodo inferior a las personas infectadas por la variante Delta, que normalmente presentan síntomas durante unos siete días.
Desde los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) confirman que los síntomas del coronavirus pueden aparecer entre los 2 y 14 días después de la exposición al virus. Y pueden aparecer de manera leve o grave, en función de la persona.