El juicio contra el español Daniel Sancho, acusado del asesinato premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta, comenzó ayer y continúa en Tailandia con la declaración de testigos de la Fiscalía y tras la decisión del juez de prohibir que se informe de los detalles de lo que ocurre en la sala.
A la vista en el tribunal provincial de Samui (isla del sur de Tailandia) ha acudido hoy también el padre del acusado, el actor español Rodolfo Sancho, quien ya asistió a la sesión inaugural el lunes, y su madre, la analista de inversiones Silvia Bronchalo, quien no había podido participar la víspera por hallarse indispuesta.
Justo en el día en el que comenzó el proceso, la plataforma de streaming HBO Max estrenaba un documental con declaraciones de Rodolfo Sancho sobre cómo ha vivido toda esta situación desde que conoció la noticia del crimen en el que estaba implicado su hijo.
La abogada y portavoz en los medios de Rodolfo Sancho, Carmen Balfagón, explicó en Antena 3 que la razón por la que el actor ha accedido a grabar este documental "se debe a la necesidad de cubrir la necesidad económica que tiene un padre para intentar salvar la vida de su hijo".
Balfagón explicó que "Tailandia es un pozo sin fondo" y que la defensa de Daniel Sancho conlleva muchos gastos, como traductores, legalizaciones, viajes, asistentes, y que también hay que pagar no sólo la comida del acusado en la cárcel sino también la de sus compañeros de celda.
Señaló además que Rodolfo Sancho no está haciendo frente a los compromisos profesionales que tenía porque se está celebrando el juicio y él "lleva ocho meses entregado en cuerpo y alma dedicado a salvar a su hijo".
Aseguró que el documental "lo ha hecho por dinero" porque necesitaba financiación y que ha hablado con el quien se la ha facilitado. Resaltó además que le ha costado mucho hacerlo porque él nunca ha vendido su vida privada.