El hombre, padre de una niña de ocho años, descubrió en el móvil de su amigo mientras bebían, un vídeo en el que aparecía violando a su hija. Tras descubrir el vídeo, se enfrentaron de forma inmediata y el pederasta logró escapar del padre que lo perseguía.
Después,el hombre acudió a presentar una denuncia ante las autoridades rusas, quienes iniciaron una persecución. El padre lo encontró antes que la policía y, al parecer, lo habría apuñalado hasta la muerte, dejando su cuerpo en un bosque, donde lo encontró la policía una semana después.
Según del Daily Mail, el presunto pederasta, de 32 años, estaba investigado por la Policía, y habría abusado de la hija menor de su amigo, a la que había cuidado en varias ocasiones. El hombre habría encontrado imágenes de su amigo abusando de otras niñas de la aldea de Vintai, en la región rusa de Samara.
El padre, que fue detenido por la policía dijo en un primer momento que durante la discusión con su amigo se tropezó con el cuchillo. Fuentes policiales citadas por el Daily Mail señalan que los vídeos serían "muy violentos" y aparecen en ellos niñas de entre seis y 11 años. Se habrían descubierto más vídeos en el móvil de la víctima.
Los vecinos de la aldea donde ocurrieron los hechos, defienden al padre. Para ellos no es un asesino porque "ha protegido a su hija y nuestros hijos". Creen que no debería ser acusado de asesinato.