El jefe de Estado ruso acudió puntual a la sede de la Presidencia francesa a las 12.00 hora local (10.00 GMT) y fue recibido en el patio del palacio por Hollande, con quien intercambió un apretón de manos.
Esta reunión bilateral precederá a la cumbre del llamado "formato de Normandía" sobre la crisis en Ucrania, en la que también participarán la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente ucraniano, Petró Poroshenko.
Este encuentro toma como base los acuerdos de Minsk, que deberían ser cumplidos en su integridad antes de finales de este año, y se inscribe en un período de escasa beligerancia tras el respetado alto el fuego del pasado 1 de septiembre.
Pero va a acaparar parte del protagonismo el inicio de los bombardeos de Rusia contra posiciones de enemigos del régimen de su aliado Bachar al Asad, entre críticas de los países occidentales, incluida Francia.
Tanto Hollande como el primer ministro francés, Manuel Valls, han destacado ante los supuestos ataques contra los rebeldes que si se quiere atacar al terrorismo a quien hay que bombardear es al Estado Islámico (EI), "no a los otros".