El candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, recibió su primer informe clasificado sobre inteligencia en una reunión con altos cargos de la seguridad nacional estadounidense. Se trata de reuniones que el Gobierno de EEUU, a través de la Dirección Nacional de Inteligencia, ha organizado históricamente con los candidatos de los principales partidos para prepararlos en asuntos de seguridad en caso de que lleguen a la Casa Blanca.
La reunión se celebró en unas oficinas de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) en Nueva York y duró unas dos horas, de acuerdo con los medios que presenciaron la entrada y salida del magnate inmobiliario. Al salir, Trump no hizo comentarios al respecto.
Horas antes del encuentro, Trump había sembrado dudas en una entrevista con Fox News sobre su confianza en la inteligencia estadounidense. "No (confío) mucho en las personas que han estado haciendo (inteligencia) para nuestro país. Mira lo que ha pasado en los últimos diez años, ha sido catastrófico", dijo el polémico candidato.
Según Trump, las decisiones tomadas por la actual Administración de Barack Obama han permitido el surgimiento de Daesh y el consecuente debilitamiento de la seguridad estadounidense. El magnate también ha criticado los informes de inteligencia que indicaron en 2003 que el presidente iraquí Sadam Husein tenía "armas de destrucción masiva" en su poder y que llevaron a la invasión de Irak por parte de la Administración del republicano George W. Bush.
"Todo lo que nos queda de Irak y nuestras operaciones en Oriente Medio es muerte, destrucción y una tremenda pérdida económica", dijo en la entrevista, al remarcar que Estados Unidos "hubiera estado mejor fuera" de todo ese escenario.
Muchos han puesto en duda que Trump esté capacitado para recibir información clasificada proveniente de la inteligencia nacional, especialmente por su temperamento impredecible y por las simpatías expresadas por el presidente ruso, Vladimir Putin.