El Día de la Memoria se instauró en 2010 y se escogió la fecha del 10 de noviembre por ser el único día en el calendario en el que no ha habido personas fallecidas por atentados terroristas. Desde esa primera edición los partidos e instituciones vascas han discrepado sobre qué víctimas deben ser recordadas este día.
Al igual que ha ocurrido en años anteriores, los populares vascos no acuden a los actos organizados por el Gobierno y el Parlamento vascos porque en ellos se recuerda también a los afectados por la violencia policial y no sólo a las víctimas del terrorismo.
Los nueve parlamentarios del PP, encabezados por el presidente de los populares vascos, Alfonso Alonso, han organizado su propio acto en la Cámara de Vitoria.
El homenaje ha tenido lugar en el mismo lugar y una hora después de que los parlamentarios vascos del PNV, EH Bildu, Elkarrekin Podemos y PSE-EE hayan rendido tributo a las víctimas del terrorismo y a las de la violencia policial en un acto oficial en la Cámara, junto a la escultura "Brújula de Medianoche".
Tras depositar una ofrenda floral junto al centro de flores que anteriormente habían colocado el resto de los grupos, los populares han guardado un minuto de silencio y a su término, Alfonso Alonso, en declaraciones a los medios de comunicación, ha advertido de que se quiere construir un "muro de olvido" en torno al proyecto "totalitario" de ETA.
Alonso ha reconocido que todas las víctimas "son iguales en el sufrimiento", pero ha alertado de que se pretenda "igualar" a todas ellas para vaciar de significado político a las de ETA y "olvidar" que fueron asesinadas para imponer un proyecto ideológico.
"Cuando se vacía de significado político a las víctimas del terrorismo lo que se hace, en el fondo, es decir que de ETA estaban mal los medios pero no se cuestionan los fines", ha reflexionado.
El presidente del PP vasco ha insistido en que la presencia de víctimas del terrorismo "ofende a ETA" e impide que se blanquee el pasado de los criminales.
Por ello ha rechazado que se quiera unificar en un mismo acto a todas las víctimas dejando sin "significación política" a las que lucharon por la libertad y fueron asesinadas por ello.
Ha denunciado que el acto del Día de la Memoria celebrado por el Parlamento Vasco con la presencia del resto de los grupos se ha hecho para que "estén cómodos quienes no han condenado jamás las atrocidades cometidas por ETA, para que puedan acudir quienes en su día celebraron cada uno de los asesinatos".
A su juicio, la idea "perversa" que subyace en el diseño de esta memoria es construir "un muro de olvido" en el País Vasco para "construir un puente de plata a ETA y a su proyecto".
Por tanto, el dirigente del PP ha reivindicado la necesidad de articular una memoria específica para las víctimas de ETA y ha señalado que su partido seguirá luchando "contra un proyecto de imposición totalitaria que todavía no ha sido capaz de condenar la violencia del pasado".