Todo listo en el Congreso para recibir a los nuevos diputados
El Congreso tiene ya todo preparado para recibir a los nuevos diputados elegidos en las elecciones del pasado 26 de junio y que tienen hasta el próximo 18 de julio, víspera de la Constitución de las Cortes, para presentar sus credenciales en la Cámara baja.
La llegada de los flamantes diputados -unos cuarenta estrenan escaño- dependerá de cómo vaya terminando el escrutinio final en cada una de las circunscripciones por parte de las juntas electorales provinciales con la suma de los votos del exterior, aunque el Congreso ya tiene preparado un dispositivo para atenderlos.
En su primera visita al Congreso, los diputados de la XII legislatura tendrán que cumplimentar diferentes trámites administrativos, como la declaración de bienes y actividades o papeleo relacionado con la retención del IRPF de sus retribuciones.
También se les tomará una fotografía para acompañar su ficha de diputado en la página institucional del Congreso, para lo que se ha instalado un pequeño estudio fotográfico junto a una de las salas de la Cámara baja donde se realizan los trámites.
A los nuevos parlamentarios que no ocupaban un escaño en la pasada legislatura se les entregará además un teléfono y una tableta nuevas, y se les dará la posibilidad de instalar una línea ADSL en sus domicilios con cargo al Congreso.
No obstante y ante la cercanía de las anteriores elecciones, los diputados que repiten en la XII legislatura han podido conservar ambos dispositivos ya que estaban prácticamente nuevos y era más engorroso retirar los terminales y volver a entregarlos pasados los comicios.
Por contra, los diputados que se han quedado fuera de la Cámara tendrán que devolverlos o, si lo prefieren, comprarlos al precio de mercado de segunda mano.
Desde que se disolvieron las Cortes y hasta el pasado domingo, la inmensa mayoría de los diputados han cobrado sus retribuciones sin cambios, bien porque pertenecen a la Diputación Permanente o bien porque han solicitado la indemnización de transición que otorga la Cámara para ese periodo.
Sólo una veintena de diputados que causó baja con el final de la XI legislatura renunció a esa indemnización, equivalente a dos mensualidades de salario íntegro.
Además de esa indemnización de transición, el Congreso también concede indemnizaciones por cese para los diputados que no repiten escaño tras las elecciones.
La cuantía de la indemnización es equivalente a una mensualidad de la asignación constitucional -2.813,87 euros- por cada año de mandato parlamentario o fracción superior a seis meses, y hasta un límite máximo de veinticuatro mensualidades.
A día de hoy, una veintena de diputados que causaron baja tras las elecciones del 20 de diciembre cobra esta indemnización de la Cámara.