Sánchez pide no caer en el desánimo y "mirar al frente" en la recta final
El secretario general y candidato del PSOE, Pedro Sánchez, ha pedido al electorado socialista no caer en el desánimo de las encuestas y "mirar al frente" en los últimos días de la campaña para hacer realidad el cambio el 26 de junio.
Sánchez ha participado junto a los miembros de su 'gobierno en la sombra' y al presidente de Aragón, Javier Lambán, en un mitin en la Sala Multiusos del Auditorio de Zaragoza con la presencia de más de 1.500 personas.
Ante las encuestas publicadas, que siguen reafirmando que la coalición de Podemos-IU desplazaría al PSOE como primera fuerza de la izquierda, tanto en votos como en escaños, Sánchez ha rogado no caer en el pesimismo.
"En estos últimos días, no miréis a ningún lado, mirad al frente, sentid los colores", ha alentado el líder socialista orgulloso del "equipazo" con el que cuenta el partido. Tras recordar que "a los socialistas nunca le han regalado nada, ni se lo han puesto fácil", Sánchez ha enfatizado que "el futuro no está escrito" y que aún hay tiempo para remontar "llenando las urnas de puños y rosas".
"Me voy a mojar. Vamos a ganar las elecciones, puerta a puerta, calle a calle, plaza a plaza, voto a voto", ha vaticinado el candidato. Para Sánchez, como ocurrió en 1982 y en 2004, la alternativa en España la encarna el PSOE porque es "un cambio que suma y no resta".
"¿Rajoy? ¿Iglesias? No. Un problema no se resuelve con otro problema. La solución está aquí, con el PSOE", ha proclamado el secretario general. Sánchez ha reprochado a Podemos que pretenda apropiarse del legado del PSOE, pero le ha invitado a no preocuparse porque serán los socialistas los que vuelvan a recuperar los derechos perdidos con el Gobierno del PP y derogar la reforma laboral.
Después de cuatro años en Moncloa, ha pedido que a Rajoy "no le salga gratis la mentira, la corrupción y los recortes" y que el relevo lo tome el PSOE "sin intermediarios". "Entiendo que hay mucha gente del PSOE que se pregunte si merece la pena o no volver a votar. Pero hoy tenemos más razones que nunca para votar al PSOE. Tenemos muy cerca el cambio y acabar con el gobierno de Rajoy", ha animado.
Antes de Sánchez, han tomado la palabra los integrantes de su gobierno de cambio, que han vuelto a juntarse después de su acto de presentación hace un mes en Barcelona, aunque con alguna ausencia, como Josep Borrell. Buena parte de los 'ministros' de Sánchez han coincidido en no bajar la moral, a pesar de los malos datos que las encuestas, y no dejarse arrebatar por Podemos el puesto que corresponde al PSOE.
"Si alguien pretende robarnos nuestra historia, adueñarse del sacrificio de millones de socialistas, no lo vamos a permitir. Estamos orgullosos de nuestra historia", ha aclamado el presidente del Congreso, Patxi López. Si los socialistas "salen a la calle con fuerza", ha añadido López, no habrá encuesta, ni disfraz, ni pinza que les puedan parar".
Junto al exlehendakari, han hablado los exministros Jordi Sevilla y Ángel Gabilondo o la exmagistrada del Tribunal Supremo Margarita Robles, quien también ha dejado claro a Podemos que el PSOE "no va a aceptar lecciones de otros que quieren gobernar para ordenar a los jueces y policías lo que tienen que hacer".
El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha deseado que Sánchez sea el próximo presidente por la necesidad de que en Moncloa haya un gobierno que "respete" y "tome en serio" a su territorio. Aragón, ha dicho Lambán, puede ser protagonista en el cambio político que necesita España para salir del "pozo insondable de corrupción, desprestigio y desigualdad" en el que la ha sumido el PP.
En las elecciones del 20 de diciembre, el PP fue la primera fuerza, con seis diputados, por delante de PSOE (4), Podemos (2) y Ciudadanos (1), aunque ante el 26 de junio, uno de los escaños de Teruel podría bailar y reajustar el reparto de fuerzas.