Ambas sedes están ubicadas en la calle Martín Vargas, del madrileño distrito de Arganzuela, la de Equo en el número 7 y la del Partido Comunista de Madrid (PCM) en el 46.
En el caso de la sede del Partido Comunista de Madrid, también ha aparecido en uno de los muros cercanos una pintada con la frase "España una grande y libre" junto al símbolo falangista del yugo y las flechas.
Además, varios cristales del local han sido rotos, según ha denunciado la formación a través de la red social de Twitter.
El secretario general del PCM, Álvaro Aguilera, ha indicado a Efe que denunciarán estos hechos a la Policía, ya que ha explicado que es la segunda vez que la sede sufre un ataque parecido en menos de un mes.
Entonces, ha explicado que no hubo rotura de cristales, pero sí hallaron una pintada con la frase "Rojos no" y el símbolo de la Falange, que fue retirada por los servicios de limpieza del Ayuntamiento de Madrid.
Aguilera sospecha que el autor o autores de estas pintadas son los mismos y, en esta ocasión, ha vinculado el suceso a la celebración de las elecciones generales que tienen lugar este domingo.
"El miedo de la extrema derecha a que haya un Gobierno de ruptura y de izquierdas les ha llevado a este tipo de acciones", ha sostenido.
Por su parte, Equo (que se ha integrado para estas elecciones generales junto a otras formaciones políticas en el partido Unidos Podemos) ha denunciado en una nota de prensa un "ataque" similar a su sede y ha manifestado su solidaridad con el PCM.
Uno de los portavoces de Equo, Juantxo López de Uralde, candidato de Unidos Podemos por Álava, ha comentado que le parece "inadmisible que hoy en día se siga tratando de amedrentar de esta forma a quien piensa diferente".
"No lo van a conseguir, vamos a votar con una sonrisa", ha añadido.
Además, en su cuenta de Twitter ha ironizado al decir: "No se enteran: somos verdes".