El enredo - Juan Liverpool acabó el 2011 tal y como lo había empezado, es decir, de mala manera. Después de superar un virus estomacal coincidente con los excesos de la cena de Nochebuena, el tío decidió participar en la San Silvestre vallecana sin apenas preparación. Al menos se puso un objetivo alcanzable: correr al trote y abandonar la prueba en el km 7, justo a la altura del metro que le llevaba a casa de sus padres. Obviamente, cumplió de sobra (no era muy difícil). Tal vez por ello se atrevió a más. Dado su pobre nivel de exigencia, pasado el punto fijado, se animó a concluir el recorrido consiguiendo una marca de una hora, diecisiete minutos y cuatro segundos. Sin duda un registro ridículo. Aún así, no le importó documentar la patética hazaña en una serie de vídeos que adjuntamos como prueba de que, efectivamente, el muchacho estuvo allí:
La semana Premier - Volvía Thierry Henry al Arsenal. Aprovechando el parón de la liga estadounidense (milita en los New York Red Bulls), el máximo goleador en la historia de los gunners con 226 goles en 370 partidos, regresaba a la que fue su casa durante casi diez años (desde 1999 a 2007) y lo hacía en un escenario cargado de emotividad: el histórico Leeds United en la tercera ronda de copa. Visto lo visto, la noche no podía terminar de otra manera que no fuera con victoria local gracias a un solitario gol del protagonista de la jornada. Por cosas como ésta es por lo que en el Emirates erigieron una estatua en su honor, inspirada en la mítica celebración de la siempre recordada cabalgada que sentenció una tarde de noviembre a los Spurs (ver vídeo a continuación).