Datos desprendidos de la memoria 2022 de la Asociación el Defensor del Paciente, que señala que Extremadura "se ubica en la zona tranquila de la estadística de las negligencias médico-sanitarias", aunque durante el pasado año "escala un peldaño" ya que los asuntos recibidos crecieron un 10 por ciento.
De los 315 casos recibidos por el Defensor del Paciente en 2022 en Extremadura, 184 de ellos fueron en la provincia de Badajoz, y 131, en la de Cáceres, y el mayor número de quejas fueron, por este orden, respecto a la Lista de Espera; las Urgencias; la Cirugía general; Traumatología, y Ginecología y obstetricia.
De acuerdo a estos casos, señala esta asociación que "la vulnerabilidad del estado de la sanidad extremeña se encuentra en la lista de espera quirúrgica", ya que es "una de las peores" de todo el Sistema Nacional de Salud, y se sitúa como "la quinta comunidad autónoma en la que los pacientes esperan más tiempo para ser sometidos al bisturí, con un período medio de 139 días, por encima de la media nacional que se sitúa en 113 días".
En total, señala el Defensor del Paciente, 21.880 extremeños se encuentran esperando a ser avisados para intervención, mientras que las especialidades que acumulan mayor volumen son Traumatología, Otorrinolaringología y Neurocirugía, "con el agravante que desde el SES prevén que en 2023 aumentarán al crecer la actividad", se apunta.
"Otra de las grietas de la sanidad extremeña reside en la tremenda falta de especialistas que azota a la región", apunta el Defensor del Paciente, que recuerda que la estimación de médicos especialistas en Extremadura, por cada mil habitantes, se sitúa en 1,84, lo que significa que está por debajo de la tasa de la media nacional, según los datos del Ministerio de Sanidad, que sería de 2,03.