De los más de cien alumnos que se manifestaron ayer por las calles de Mérida un grupo de poco más de una decena de ellos intentó entrar el miércoles pasada la una y media de la tarde en el colegio salesiano, María Auxiliadora de la capital extremeña. Y el alcalde de Mérida, Pedro Acedo, ha condenado estos hechos y ha pedido responsabilidades a los padres si los que han protagonizado este incidente son menores. Aída Díaz del sindicato de estudiantes, organizadores de esta manifestación, ha señalado que ellos no han tenido nada que ver y que no aprueban la violencia. Por su parte, el subdirector del colegio salesiano ha indicado que no entienden que hacían estudiantes tan jóvenes intentando alterar el desarrollo de las clases y haciendo pintadas en las que se leen “menos crucifijos y más trabajo fijo” Los estudiantes implicados que señalan que no tiraron comida a las imágenes religiosas del colegio, que no ha habido ninguna violencia y que los policías venían acompañándoles en la manifestación. No obstante el colegio salesianos interpondrá un demanda contra este grupo de jóvenes por intentar entrar en el centro educativo por gritar contra la institución, violentar al personal e intentando impedir el normal desarrollo de las clases. El subdirector de los salesianos Bernabé Arjona, ha señalado que debe haber alguien detrás de este grupo de jóvenes. Uno de los representantes del colectivo 15 M de Mérida, Álvaro Rodríguez, que se encuentra entre el grupo de estudiantes que se manifestaron, ha negado que gritaran que querían quemar a curas y que se limitaron a pregonar “menos crucifijos y más trabajo fijo” Y desde la FREAPA Joaquina López ha señalado que le da pena que se haya desvirtuado el significado de la protesta