Baraja afirma que el partido del Espanyol fue uno de los más duros como entrenador
El entrenador del Valencia se sincera en "The Coaches' voice"
Valencia | 07.11.2023 13:41
Rubén Baraja ha ofrecido una entrevista a "The Coaches' voice" donde repasa algunos momentos de la pasada temporada.
Explica el vallisoletano cómo fue su llegada al banquillo valencianista. Fue una llamada del Director Deportivo donde le propuso tomarse una café juntos, "Miguel Ángel quería conocer mis impresiones sobre el Valencia. Quería saber cómo veía yo al equipo y cuál era mi predisposición para cogerlo, porque no era un momento en el que todo el mundo se atrevía a decir que sí", afirma Baraja. "Yo le dije a Miguel Ángel que me sentía preparado y le expliqué lo que yo podría hacer con el equipo, además de que podría ser un mensaje positivo para la afición contar con alguien de la casa. Jugué diez temporadas en el Valencia. Pero también sabía que no era el único candidato. Después de esa conversación, solo quedaba esperar. Pasaron varios días de nervios esperando una respuesta. Y el Valencia, en boca de Miguel Ángel, finalmente me llamó para decirme que yo era el entrenador".
Los inicios no fueron fáciles tal y como afirma el técnico. "La primera semana de trabajo con los jugadores fue complicada porque se sentían descolocados por la situación que estaban viviendo. Se había ido Gattuso sin que ellos lo esperaran, ‘Voro’ apenas estuvo tres partidos y después llegamos Carlos y yo".
Después de remontar el vuelo reconoce que el partido en el que peor lo pasó fue el del Espanyol. "Todavía después de ganar al Celta de Vigo y al Real Madrid, y llegar a los 40 puntos teníamos la sensación de que nos lo jugábamos todo en los tres últimos partidos de Liga: Mallorca, Espanyol y el Real Betis. Perdimos ante el Real Mallorca fuera de casa en un partido en el que no estuvimos a un buen nivel. De ese modo, la jornada ante el Espanyol en Mestalla se convirtió en decisiva, además porque jugábamos contra un equipo con muchas más urgencias que nosotros para salvarse, ya que solo les valía ganar para seguir con opciones de seguir en Primera. Te juro que ha sido uno de los partidos más duros de mi carrera. Como entrenador y como jugador".
Respecto al día en que se consiguió la permanencia, ante el Betis en la última jornada de Liga segura que "El partido ante el Betis en Sevilla fue el 4 de junio. El día 110 desde mi llegada al Valencia. 110 días que también debes gestionar con la familia. No te puedes llevar a casa toda la tensión que vives con el equipo. Al menos yo traté de hacerlo así, y creo que pude conseguirlo".
De ese partido recuerda que "ante el Betis se condensó en 90 minutos todo lo que habíamos vivido durante ese tiempo. Primero, mucho miedo con el 1-0 del Betis nada más empezar el partido. Es cierto que las cuentas nos seguían manteniendo en Primera, pero ya no dependíamos de nosotros mismos, sino de otros resultados. Estábamos en el alambre".
Añade que "después, pasamos a sentir alivio con el gol de Diego López para el 1-1 en el minuto 71, y finalmente la liberación con el final del partido. Fue eso, un estadillo de liberación de Carlos y yo en el banquillo. Liberamos toda la tensión que habíamos acumulado. También los jugadores. Está claro que nadie quiere vivir momentos como los que vivimos en la temporada 2022/23".
Y vuelve a insistir en que "para mí, ser el entrenador Valencia es vivir un sueño. Pero mucho más lo es tener la enorme suerte de representar al equipo y a su afición".