El Obispado de Menorca destaca la huella del papa Francisco en favor de los más débiles
Para la iglesia menorquina, el pontífice ha sido un ejemplo en la lucha por los derechos de los más vulnerables
Menorca |

El Obispado de Menorca ha lamentado el fallecimiento del papa Francisco y ha destacado la huella del pontífice en favor de los más débiles.
Este es el comunicado del Obispado:
Toda su vida estuvo dedicada al servicio del Señor y de Su Iglesia. Nos enseñó a vivir los valores del Evangelio con fidelidad, valentía y amor universal, especialmente en favor de los más pobres y marginados.
Con inmensa gratitud por su ejemplo de verdadero discípulo del Señor Jesús, encomendamos el alma del Papa Francisco al infinito amor misericordioso del Dios Uno y Trino.
Recibimos esta noticia de la muerte del Papa Francisco con un gran dolor. La muerte de un padre de familia es un momento duro y se agolpan en nuestros corazones numerosos sentimientos, difíciles de coordinar, pero en este año jubilar de la esperanza, quisiera poner de manifiesto en primer lugar la centralidad de esta virtud en la vida cristiana.
Hace pocos días leía una introducción de un libro escrita por el Papa, donde se hacía dos preguntas "¿Qué será del hombre después de la muerte? y ¿Qué será de mí?". Se trataba transmitirnos una certeza: Jesucristo muerto y resucitado es la puerta abierta de la esperanza para todo creyente. Y también para el Papa. en este lunes de la Octava de Pascua, confiamos plenamente en la misericordia de Dios, al que suplicamos acoja en su gloria al Papa Francisco y le conceda la plenitud de la vida eterna en la que creyó y esperó durante toda su vida.
Un segundo sentimiento es el agradecimiento a Dios por la vida y el ministerio del Papa Francisco. Sus doce años de pontificado han sido muy fecundos en todos los campos, pero muy especialmente en la eclesiología. El documento final del Sínodo de los Obispos del mes de octubre pasado podía ser como un testamento de su pontificado.
Ahora simplemente comunicar a todo el pueblo de Dios que peregrina en Menorca esta dolorosa noticia, que también conmoverá a nuestra sociedad, por la inmensa simpatía de la que gozaba el Papa Francisco, especialmente por su amor y cercanía para con los más pobres y necesitados.
Recuerdo la peregrinación diocesana a Roma con motivo del Jubileo. Sustituimos la presencia física del Papa en una audiencia programada que no pudo llevarse a término, por la visita al Hospital Gemelli, donde el Papa Francisco estaba internado. Fueron momentos intensos donde experimentamos la comunión profunda de la Diócesis de Menorca con el Papa. Esta misma vivencia ahora inunda también nuestros corazones, transidos por el dolor y abiertos a la esperanza de la vida eterna.
Pido a las sacerdotes que tengan presente esta intención en sus celebraciones, invitando a los fieles a rezar por el Papa Difunto.
Unidos en la fe, la esperanza y la caridad, pidiendo la intercesión de María, permanezcamos unidos fraternalmente como familia de Dios en Menorca.