En su intervención durante la fase de informes finales, el letrado de la promotora catalana, Cristóbal Martell, ha negado que los exaltos cargos de UM que se sientan en el banquillo actuaran con "dejación por negligencia" puesto que entre ellos hay una licenciada en Derecho "de brillantísima trayectoria", en referencia a la expresidenta del Parlament y del Consell de Mallorca Maria Antònia Munar; un economista "de éxito", en alusión al exconseller Miquel Àngel Flaquer, y un abogado como el exvicepresidente insular Miquel Nadal.
"No es creíble que no se miren las cosas veinte veces con lupa e hilen fino", ha incidido el abogado en torno al proceso presuntamente amañado por el que los terrenos de Can Domenge fueron adjudicados a su competidora Sacresa, considerando de este modo "imposible ser tan negligente en gente que a lo largo de su vida han demostrado tanta sagacidad e inteligencia".
En el caso concreto de Munar, Martell se ha mostrado tajante al apuntar a su "extraordinaria capacidad" de desplegar "su dominio sin aparecer en ninguna foto" puesto que "quienes salían eran sus soldados" [sus entonces consellers].
Es más, ha tildado de "maquiavelismo político" el hecho de que "trajera a sus socios de gobierno al pleno para que, asustados y aturdidos, votasen a favor del proyecto porque había un pacto de gobierno y se diera lugar así a esta situación tan pintoresca".
"Munar quitaba y ponía soldados, e iba dirigiendo todo este proceso", ha recalcado el letrado, preguntándose: "¿Alguien puede pensar que va a vender la joya de la corona [el solar de Can Domenge] y se va a quedar al margen?". "Es algo que atenta a la inteligencia", ha añadido Martell, considerando que "no es creíble" que la expresidenta no estuviera al tanto puesto que "estaba vendiendo el mejor activo".