SOCIEDAD

Crece el número de trabajadores con sueldo que viven en la calle por los altos precios de la vivienda en Mallorca

Este es el alarmante mensaje del que avisan las entidades sociales de la Iglesia, que a lo largo de 2023 han atendido a 815 personas sin hogar, según han anunciado este miércoles en una rueda de prensa en Palma

Patricia Segura

Palma | (Publicado 23.10.2024 13:02)

Imagen de archivo del detalle de la vivienda improvisada bajo un puente de una persona sin hogar | EFE

Cada vez más trabajadores con sueldo en Mallorca se convierten en personas sin hogar debido a la crisis residencial en la isla. Este es el alarmante mensaje del que avisan las entidades sociales de la Iglesia, que a lo largo de 2023 han atendido a 815 personas sin hogar, según han anunciado este miércoles en una rueda de prensa en Palma.

Además, insisten en que los programas sociales "han llegado a su límite" con largas listas de espera que siguen creciendo "a causa de la emergencia habitacional en Mallorca", según el padre e impulsor de Sojorn, Jaume Alemany, que se ha referido al recién anunciado programa 'Alquiler Seguro' del Govern, una medida que considera "insuficiente" para revertir la situación.

También reclaman más servicios a las instituciones públicas y recuerdan que, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, la tasa de personas sin hogar en Baleares se sitúa en 60 casos por cada 100.000 habitantes. Una cifra que no solo crece en Palma, sino que "se expande a todos los municipios de Mallorca", según Teresa Riera, técnica del servicio de Vivienda y Personas Sin Hogar de Cáritas Mallorca.

A finales de noviembre el Bisbat de Mallorca abrirá un nuevo centro residencial con apartamentos para familias en Binissalem para acoger a personas sin hogar de la zona de Es Raiguer, según ha avanzado Toni Moyà, director de La Sapiència.

Las asociaciones exigen soluciones urgentes en el marco del Día de las Personas Sin Hogar, que se conmemora este domingo, 27 de octubre, en el que se hará una misa a las 11 de la mañana en la Parroquia de Déu de Montserrat del Rafal en Palma y otra a las siete de la tarde en la Parroquia de Santo Domingo en Inca.