El Govern ha estimado una posible caída en los ingresos de unos 100 millones de euros en el presupuesto de este 2012. Además, ha señalado que pretende atajar el déficit de Baleares con medidas de flexibilidad horaria y la reestructuración de la Administración, según ha informado el vicepresidente económico del Ejecutivo, Josep Ignasi Aguiló.
En rueda de prensa, en la que se ha presentado la liquidación de presupuestos de 2011, que se ha cerrado con un déficit del 3,8% (1.016 millones de euros), Aguiló ha señalado que el Govern está barajando la posibilidad de que los funcionarios puedan reducir su jornada laboral -de manera voluntaria- a cambio de cobrar menos.
Aguiló ha descartado recuperar impuestos que se cobraban en legislaturas pasadas y ha destacado que el presupuesto de 2012 se elaboró en un escenario de incertidumbre y que por eso se planeó que se pudiera ver modificado, pero "a pesar del desfase sigue siendo válidos".
"UN ALUMNO AVENTAJADO EN EL CONTROL DEL DÉFICIT"
El vicepresidente ha afirmado que Baleares es "un alumno aventajado en el control del déficit" aunque aún no tengamos las cifras que queremos" y ha señalado que si bien se ha conseguido el 3,8% sino se hubiera puesto en marcha las políticas de contención del déficit, éste "podría haber llegado al 5,5%" si se seguía la tendencia marcada por el anterior ejecutivo.
Desde la Dirección General han señalado que el objetivo de 2012 es situarse "en el 1,5%, financiar y cubrir el déficit de tesorería del ejercicio 2012" para poder "liberar recursos para el sector privado".
"Para este año la idea es transformar la deuda comercial -que es de 1.100 euros- en deuda con entidades bancarias para "no machacar al sector privado. El objetivo es la reducción de la deuda para liberar recursos en el sector privado y que este se pueda expandir", han destacado.