Con motivo de la celebración el jueves 28 de septiembre del Día Marítimo Mundial que puso en marcha Naciones Unidas para, entre otras cuestiones, "abogar por la protección del medio ambiente frente al impacto de las embarcaciones y del transporte marítimo", el Observatorio de Sostenibilidad de IbizaPreservation ha hecho públicos los datos de vigilancia de los fondeos sobre posidonia correspondientes a 2022.
Según datos ofrecidos del Servicio de Vigilancia de la Posidonia que desarrolla el Instituto Balear de la Naturaleza (IBANAT) del Govern Balear y que se recogen en el Informe de Sostenibilidad 2022 del Observatorio que sigue en proceso de elaboración, el número de actuaciones durante la temporada de vigilancia de 2022 aumentó un 74,9 % respecto a las del año pasado, llegando hasta 37.473 .
De todas ellas, el 16,6 % han sido informativas, un 10,4 % han sido de asesoramiento para eliminar el impacto del anclaje de manera previa al ayudar a fondear antes de tirar el ancla, y un 66.3% de comprobación del anclaje y de las cadenas tanto de manera visual como mediante mirafondos. Finalmente, un 6,7 % han buscado mover las embarcaciones fondeadas en posidonia a otros emplazamientos.
Algo que se debe, según este análisis "al aumento del número de embarcaciones que realizan la vigilancia hasta llegar a cuatro, incluyendo una nueva que tiene más potencia y tamaño, la cobertura de nuevas zonas de vigilancia y la profesionalidad y compromiso de los patrones de las embarcaciones de vigilancia".
En este sentido, se han tratado nuevas zonas como Sant Antoni de Portmany y áreas colindantes, incluyendo algunas que destacan por la masificación de embarcaciones.
Pese a estas mejoras desde el Observatorio insisten en la necesidad de impulsar medidas capaces de frenar el fondeo masivo de embarcaciones en las costas de Ibiza y Formentera, muy especialmente sobre pradera de posidonia, y también regular el tráfico de embarcaciones que se registra a diario en las Pitiusas en los meses de temporada turística.