En su intervención, muy dura, pura dinamita, Mariano Marín señaló con nombres y apellidos a los responsables de la situación que ahora vive la formación en la ciudad.
Acusa a la presidenta regional de amenazarle en una reunión en la que le dijo que “si no dimitía, tomaría medidas”. Marín ha acusado en ONDA CERO a la dirección regional de “reventar cualquier junta local que yo organizara”.
Cree que detrás de todo está la intención de “satisfacer intereses personales” y acusa al secretario general en Gijón, Pablo González, de darle consejos que “siempre tenían una doble intención para satisfacer sus propios intereses”.