Los expertos apuestan por una readaptación progresiva en su uso. Y las empresas que las producen están a la expectativa de los cambios de producción que puedan llegar.
Fortia Seguridad y Salud es una empresa que nació en los primeros meses de pandemia. Una fábrica en Morcín, en la que ahora trabajan doce personas, y que produce y distribuyen diferentes modelos de mascarillas. La única en Asturias.
En estos momentos producen a diario 10.000 mascarillas quirúrgicas y entre 10.000 y 15.000 unidades de FFP2.
Su responsable de comunicación, Tatiana Valledor, nos ha contado en Onda Cero que se vio “gratamente” sorprendida durante el fin de semana porque “la gente mantiene las medidas de protección”. Le sorprendió “muchísimo” que mayoritariamente sigamos usando el tapabocas.