Unos 100 empleados de las Inspecciones de Trabajo y Seguridad Social de Aragón están llamados este lunes a secundar la primera jornada de huelga convocada para reivindicar mejoras organizativas y el refuerzo de estos organismos que se encargan de detectar el fraude o la regularización de trabajadores. Denuncian que esta legislatura su carga de trabajo ha aumentado un 355%y no se han reforzado las plantillas.
En Aragón, solo hay unos 50 subinspectores e inspectores. Los sindicatos a nivel nacional ya pactaron un plan estratégico dotado presupuestariamente para aumentar plantillas y la nueva relación de puestos de trabajo, pero los ministerios de Trabajo y Hacienda no se ponen de acuerdo en la aplicación.
El presidente del sector de la Administración General del Estado de CISF Aragón, Paco Domínguez, ha explicado las implicaciones de esta huelga. Entre otras cosas, afectará a la aplicación del Estatuto del Becario, el control de los planes de Igualdad en las empresas, los controles horarios y de jornada o la reciente campaña para prevenir los golpes de calor en los lugares de trabajo.