La huelga tensiona la distribución de algunos alimentos
Las materias primas no llegan a muchas empresas y las que disponen de ellos no pueden distribuirlo. En los supermercados falta leche o aceite de girasol e insisten en no comprar compulsivamente.
La cadena de distribución de productos está ya muy tensionada en esta décima jornada de huelga de los transportistas. Son eslabones unidos y, en el momento que se rompe uno, afecta a los demás. Así, las materias primas no están llegando a las empresas y las que disponen de producto no pueden distribuirlo para que llegue a los consumidores. Los paros no están dificultando el transporte dentro de Aragón, pero sí de artículos o alimentos que llegan desde otros territorios.
La cadena de valor está en una situación más límite que durante la pandemia, pero, de momento, garantizan el abastecimiento. El director general de la Asociación de Empresas de Gran Consumo, José María Bonmatí, señala que los costes están aumentando de manera preocupante, ya que hay problemas con el transporte de materias primas o el embalaje. Por eso, pide responsabilidad de los camioneros y un mayor compromiso al Gobierno de España.
Piden no acaparar productos
Los responsables de la cadena de distribución también piden responsabilidad a los consumidores. El presidente de la Asociación de Cadenas Españolas de Supermercados, Aurelio del Pino, señala que las compras compulsivas pueden provocar el desabastecimiento.
No hay desabastecimiento de productos en los supermercados, pero sí escasez de leche o aceite. Eso sí, insisten en que, de momento, aún hay stock. Dónde no hay problema es con los productos frescos. En los mercados no falta carne ni verdura. La cercanía de los productores de hortalizas hace que el abastecimiento en los mercados esté garantizado de productos como la acelga, la alcachofa o el repollo.
En cambio, hay problemas para que lleguen camiones de fruta procedente de Levante o Murcia. Eso sí, el presidente de los hortelanos de Zaragoza, Cristóbal Omedes, señala que está aumentando el coste de las materias primas y que, de momento, no repercutirán el precio en los consumidores.