No ha podido ser más efectivo el afamado cocinero marbellí Dani García. En tan sólo seis meses que lleva abierta su nueva propuesta gastronómica, Smooked Room, en Madrid, se ha llevado de una tacada dos Estrellas Michelin.
Además, el ya poseedor de dos distintivos en Skina, Marcos Granda, le da otro a Marbella, con su barra omakase de cocina japonesa en Nintai. La alegría del chef asturiano es doble porque su jefe de cocina en Skina, Mario Cachinero, se ha llevado el Premio Michelin para Jóvenes Chefs.
Completan el mapa de la calidad gastronómica de la zona Bardal en Ronda, con también dos galardones; mientras que tienen uno Messina y El Lago, en Marbella, y Sollo, en Fuengirola.