España solo transporta por ferrocarril el 3’8% de sus mercancías, lo que supone que el 96’2% restante se hace todo por carretera. Este dato sitúa a la Península Ibérica como el territorio peor conectado por tren de toda Europa. Los objetivos que se marca empiezan por pasar de ese 3’8% de transporte al 30%, casi 10 veces más que ahora mismo. Apuestan por realizar un plan de transporte ferroviario de mercancías, al margen del de pasajeros, y conseguir que los productos puedan salir desde ciudades como Málaga o Huelva.
Para ello, planean proyectar un gran eje que conectaría los centros logísticos del Norte de África y el Suroeste de Europa hacia Francia y el Mar del Norte, que discurriría por el interior de la Península Ibérica y atravesaría los Pirineos. Para conocer todos los detalles, hablamos con Ignacio Barron, secretario general de la Alianza y presidente de la Comisión de Accidentes Ferroviarios.