El presidente de Gobierno en funciones y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, busca cerrar acuerdos "cuanto antes" para poder armar una mayoría parlamentaria que le permita sacar adelante su investidura.
Para ello, Sánchez comenzará este miércoles a reunirse con los grupos parlamentarios. La ronda de contactos comenzará con la vicepresidenta segunda en funciones y líder de Sumar, Yolanda Díaz y la semana que viene se verá con el resto de formaciones, excepto Vox.
No obstante, en la dirección socialista son conscientes de que todavía "queda trabajar" con los eventuales apoyos parlamentarios, en una negociación que ahora es más "intensa".
Desde el PSOE admiten que el acuerdo todavía no está armado, porque en algunas cuestiones siguen en posiciones de máximos, pero se aferran a la "discreción" como receta necesaria para que fructifique un acuerdo que permita un gobierno que dure toda la legislatura.
En paralelo a la investidura, los socialistas están tratando los acuerdos para la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para el próximo año. El Ejecutivo lleva "todo el verano" trabajando en ello, especialmente el Ministerio de Hacienda que dirige María Jesús Montero.
Tras aceptar el encargo del Rey para la investidura, Sánchez se ha mostrado decidido a recabar los apoyos necesarios. Tanto es así, que será él quien mantenga las reuniones con todos los portavoces parlamentarios en el Congreso, a excepción de Vox. Esto dará lugar a que, por primera vez, haya un retrato de líder del PSOE con representantes de EH Bildu o Junts.
Según apuntan desde Ferraz, los socialistas serán claros en su posición y en los límites a la hora de pactar con los partidos independentistas, porque no solo lo ven una cuestión practica para sumar el apoyo a la investidura de Sánchez, sino una convicción.
En su comparecencia en La Moncloa, Sánchez se ha mostrado orgulloso de la decisión política que tomó en junio de 2021 con los indultos a los líderes condenados porque la situación hoy en Cataluña "constata" que fue una decisión "acertada y bien tomada en aras del interés general".
El presidente en funciones ha evitado pronunciar la palabra 'amnistía' en su comparecencia. Tampoco ha dado detalles sobre cuánto cederá al independentismo para lograr ser investido presidente de nuevo. Se ha limitado a decir que fijará posición cuando termine de reunirse con los grupos parlamentarios.
Por otro lado, ha reconocido que ya están hablando con las fuerzas independentistas y ha trasladado la garantía de que cuando alcancen los acuerdos, que espera que así sea, estos "serán públicos y transparentes y avalados por el poder legislativo".