Díaz y Abascal batallan en su gran escaparate de la campaña con Sánchez de testigo y Feijóo ausente
El diario de campaña de las elecciones generales del 23 de julio con la última hora de PSOE, PP, Sumar y Vox hoy marcada por el debate a tres
El Debate a tres tampoco fue el debate de Pedro Sánchez. Su sociedad con Yolanda Díaz, instantánea ya desde el primer minuto, acabó siendo un toma y daca ideológico entre extremos: Santiago Abascal y ella misma. Al candidato socialista, que dejó la iniciativa a su socia de Sumar le quedaba poner en valor ante Abascal su gestión económica y de escudo social, parte de la cual acabó reclamando también la propia Díaz.
La líder de Sumar, que atacaba con toda su energía al líder de VoX en materia de inmigración y de derechos de las mujeres, cobraba protagonismo a cada minuto frente a su socio del PSOE, que buscaba su complicidad sin éxito a pesar de llamarla “vicepresidenta” constantemente. De hecho, la candidata de Sumar llegó a decirle a Sánchez “Pedro, hay que hacer más cosas, hay que salir una hora antes del trabajo. No basta con lo que hemos hecho”. Y cuando Sánchez replicaba “Ya, pero hay que tener los pies en el suelo” Díaz lo miró muy seria y le contestó amenazante “Yo los tengo, Pedro” a lo que el presidente del gobierno respondía enseguida “lo sé, lo sé, Yolanda, te conozco”.
Después del único momento tenso entre los socios de gobierno, Sánchez optó por enfocar su crítica al gran ausente Núñez Feijóo, asegurando a la audiencia que el líder del PP no había venido por la vergüenza de que vieran emparejado con su socio Abascal.
Feijóo descansa en Valencia después de las horas más irregulares de la campaña, con tres imponderables, uno de ellos previsto. Estaba amortizada su ausencia en el debate a tres de RTVE; pero no se contaba con su lumbalgia, ni con el incendio en La Palma que le ha dejado en la Península la jornada marcada en la agenda para sendos actos en Canarias.
Su equipo ha cubierto el vacío matinal con una entrevista en Al Rojo Vivo. A preguntas de Ferreras, el líder del PP ha insistido en que lo del voto por Correos ha de resolverse de modo impecable; ha ponderado su gestión de casi tres lustros al frente de la Xunta que le habilita para rebajar tensiones separatistas; y ha subrayado los motivos de su ausencia en el debate porque “falsea” la realidad política de España “al vetar el PSOE” la presencia de aliados necesarios como BILDU o Esquerra. Al término del debate, Fuentes del PP han opinado: “Hemos visto un debate tan plano que hasta el moderador les ha tenido que rogar que interactuasen” […] “Si algo ha quedado claro en este debate es que el PP es el único que sale a ganar las elecciones, el único que tiene un proyecto y el único que quiere superar la división, el bloqueo y el enfrentamiento que defienden unos y otros”.
En otro ámbito paralelo de tácticas electorales, el equipo de campaña ha vuelto a impactar en la calle. A las dos lonas colgadas en el Paseo de la Castellana y en Alcalá, hoy se añadía otra herramienta más disruptiva, una maqueta de la cabina del Falcon en pleno Recoletos con una foto-cartón del presidente del Gobierno trajeado y con gafas del sol, completada con el lema “un billete para Pedro”.
El gran momento de la campaña para Yolanda Díaz. Por fin, después de tantos días esperándolo, llegó el debate. En él había centrado todas sus esperanzas, más desde que en el cara a cara su partener se vino abajo. La candidata de SUMAR pensó que si hacía falta sería ella quien cogiera las riendas de la izquierda. Sánchez a su lado, juntos frente a Abascal. Una imagen para movilizar a la izquierda.
De ahí, al segundo paso: reclamar para sí el voto útil de la izquierda que le permita arrebatar la tercera plaza a Vox. La tercera plaza, esa en la que se juegan un buen puñado de escaños. El suficiente…quizás para revalidar Gobierno, que es su sueño. Si no, quizás, al menos, para que no sea vergonzante la comparativa con lo que obtuvo Podemos en las anteriores. Que es su necesidad.
Por lo que pueda pasar, Yolanda Díaz ya ha repetido un par de veces que “SUMAR ha venido para quedarse”. En la Sexta, antes del debate, lo repitió un par de veces. “Sí, sí”, dijo. “¿Sea cual sea el resultado?”, preguntó Ferreras. “Sea cual sea el resultado”, insistió.
Sin corbata, sonriente y a la derecha de Yolanda Díaz y de Pedro Sánchez, Santiago Abascal se ha presentado en el Debate de RTVE como la verdadera alternativa a Sánchez. Ha comenzado a la defensiva, previniendo a los espectadores de las mentiras del presidente y candidato socialista y de su mala gestión económica. Y pese a la complicidad evidente entre Pedro Sánchez y Yolanda Díaz, el candidato de Vox ha sacado a relucir algunos de los temas sobre los que ha girado su campaña electoral. Ha arremetido contra la Ley de Violencia de Género, la Ley Trans, la Ley de la Eutanasia o la Ley del Sólo Sí y sus efectos indeseados. Ha sido en ese momento cuando Abascal le ha dicho a la cara a Sánchez que es su culpa que más de un centenar de violadores estén en la calle y que más de mil se hayan beneficiado de una rebaja de condena.
Uno de los momentos más tensos del debate ha sido cuando Yolanda Díaz le ha sacado a Abascal una fotografía de dos diputados de Vox en Valencia riéndose durante el minuto de silencio por una mujer asesinada. Abascal no ha entrado y ha desviado el tema acusando a Díaz de encubrir a uno de sus asesores que ha sido denunciado por pederastia.
Y pocas alusiones del líder de Vox al candidato popular, el ausente Alberto Núñez Feijóo, pese a la insistencia de Yolanda Díaz de poner su nombre sobre la mesa y vincularlo al de Santiago Abascal.