JORNADA 14 | REAL MADRID - CELTA

El Real Madrid quiere seguir ampliando su récord de victorias ante un Celta de capa caída

El Real Madrid afronta el reto de mantener la brillantez de su juego sin el futbolista que se ha convertido en cerebro del buen gusto, Isco Alarcón, baja por sanción ante un Celta de Vigo que quiere cortar su mala racha y la buena de los blancos y recuperar la imagen que dejó ante Barcelona y Atlético.

ondacero.es

Madrid | 06.12.2014 10:37

Jesé, Sergio Ramos e Isco en el entrenamiento | EFE

El Real Madrid intentará este sábado en el estadio Santiago Bernabéu ante un peligroso pero actualmente dubitativo Celta de Vigo alcanzar la cifra de 18 partidos oficiales consecutivos ganados, un récord que está en poder del FC Barcelona de la temporada 2005-2006 y que le serviría para mantener el liderato en la Liga.

El conjunto madridista sigue sin fallar desde que perdiese en el derbi allá por el mes de septiembre y volverá a tener una buena prueba de su actual nivel ante un rival que ya ha demostrado su peligrosidad esta temporada, aunque no acude a la capital en su mejor momento.

La modesta UE Cornellá fue la última víctima de los de Carlo Ancelotti, elogiado desde todos los frentes, y que ahora quieren igualar lo que hizo el conjunto azulgrana también en el tercer año de Frank Rijkaard y por unas fechas similares, para luego superarlo en un partido de tinte más plácido como es la visita en la Liga de Campeones del Ludogorets.

Además de la competitividad que ha demostrado el Celta, otro de los problemas con los que tendrá que lidiar el actual campeón de Europa es la del novedoso mediocampo que formará. A la baja conocida de Luka Modric se ha unido la de Sami Khedira por lesión y la de Isco por sanción, lo que provocará la entrada como titular de Asier Illarramendi junto a Toni Kroos y James Rodríguez.

El vasco sabe que este partido y el siguiente ante el equipo búlgaro son sus mejores oportunidades para ganarse la confianza de su técnico para poder ser más usado en el futuro. En su anterior partido liguero como titular, ante el Elche a finales de septiembre, formó con Modric y James y el equipo dio buen nivel, aunque el conjunto del 'Toto' Berizzo parece más amenazante por su intensidad.

Será el único cambio en el equipo habitualmente titular de Ancelotti, que recuperará a Casillas, Carvajal, Pepe, Ramos, Marcelo, Bale, Benzema y Cristiano, que descansaron en la Copa del Rey. El delantero portugués tiene en el Celta una víctima a la que suele marcar, ya que lo ha hecho en los cinco partidos en los que ha jugado, con nueve tantos, dos de ellos en la victoria por 3-0 del año pasado.

Además, junto al de Madeira estará el francés Karim Benzema que está atravesando un espectacular estado de forma, tanto de juego como cara a puerta, marcando en sus últimos cinco partidos ligueros, por lo que la defensa celtiña deberá estar muy pendiente de su actual conexión.

Por su parte, el Celta llega al Bernabéu en su momento de más dudas de la temporada, producido a raíz curiosamente de su brillante victoria en el Camp Nou, que propició el liderato del conjunto blanco. Sin embargo, desde ese momento, ha habido un 'apagón' y el conjunto gallego acumula cuatro partidos sin ganar y con problemas de cara a puerta.

Así, el pasado miércoles en la Copa del Rey, sumó un nuevo revés ante la UD Las Palmas (2-1), que unió al empates ante el Granada (0-0) y las derrotas ante el Rayo Vallecano (1-0) y el Eibar (0-1), aunque el juego del equipo no ha sufrido realmente un bajón.

El año pasado, con Luis Enrique en el banquillo, demostró ser un rival complicado y pese a perder con un marcador abultado (3-0), tuvo buenas ocasiones para ponerse por delante y no encajó el 1-0 hasta el minuto 67. Además, fuera de casa se ha mostrado como un obstáculo complicado, cayendo solamente en Vallecas, siendo capaz de empatar en el Calderón y encajando únicamente cinco goles, prueba de su solidez defensiva y la intensidad que preocupa a Carlo Ancelotti.

La buena noticia para Berizzo es que parece que podrá contar finalmente con el chileno Fabián Orellana, que sufrió un esguince acromio-clavicular en Las Palmas de Gran Canaria, de cara a conformar el peligroso triángulo ofensivo que forma con Nolito y Joaquín Larrivey