Un juez brasileño concedió la libertad condicional al presidente del Comité Olímpico Irlandés y exdirigente del Comité Olímpico Internacional (COI) Patrick Hickey, que está preso desde hace dos semanas en Río de Janeiro acusado de venta ilegal de entradas de los Juegos Olímpicos de Río 2016.
La liberación del exdirigente del COI, de 71 años, fue ordenada este lunes por el magistrado Fernando Antonio de Almeida, titular de la Sexta Cámara Criminal del Tribunal de Justicia del Estado de Río de Janeiro, ante una petición de los abogados del irlandés.
El magistrado, sin embargo, determinó que Hickey le entregue su pasaporte a las autoridades brasileñas y se comprometa a no salir de Brasil hasta que no sea juzgado, informó el tribunal en su página en internet.
La explicación del caso
El dirigente fue detenido a mediados de agosto en un hotel de Río de Janeiro durante los Juegos Olímpicos, acusado de integrar una red que vendía ilegalmente entradas para las competiciones. Hickey es acusado formalmente de haber facilitado la reventa de entrada para los Juegos Olímpicos, de haberlos ofrecido ilegalmente y de asociación para delinquir.
El magistrado que le concedió la libertad condicional aceptó los alegatos de la defensa según los cuales ninguno de los tres crímenes imputados al dirigente prevé pena de prisión de más de cuatro años, por lo que no se justifica mantenerlo en una cárcel de forma preventiva.
"No se verifica de forma concreta la necesidad de que el acusado sea mantenido bajo custodia cautelar ya que los argumentos que justifican la orden de detención no son los ideales y a que no se vislumbra que su liberación pueda generar algún obstáculo o riesgo a la investigación o a la futura aplicación de la ley penal", alegó De Almeida en su decisión.
Tras su detención y ante el escándalo, Hickey renunció temporalmente a su cargo en el Comité Olímpico Irlandés y a sus diferentes funciones en la dirección del COI, como presidente de los Comités Olímpicos Europeos y vicepresidente de la Asociación de Comités Olímpicos Nacionales (ACNO).
Un escándalo
Según la Policía brasileña, el Comité Olímpico de Irlanda contrató a la empresa Pro 10 para vender entradas en Brasil y los boletos fueron transferidos a la firma THG, cuyo director, el también irlandés Kevin James Mallon, fue detenido a comienzos de agosto en un hotel en el que fueron aprendidos 1.000 entradas.
La empresa, de acuerdo con la Policía, vendía entradas con precios hasta cinco veces por encima de lo normal y pedía hasta 8.000 dólares por un boleto para la ceremonia de apertura y hasta 15.000 dólares para el acto de clausura.
La Justicia brasileña ya había determinado la liberación, igualmente condicional, de Mallon, que salió de la cárcel de máxima seguridad de Bangú en la noche del sábado. A Mallon también le fue retenido el pasaporte y tampoco puede abandonar Brasil.