El Real Madrid se aferra al milagro en Granada y a su once de gala ante un Deportivo en crisis
El Real Madrid tendrá que esperar un pinchazo del Barcelona en Los Cármenes y ganar su partido en Riazor ante un Deportivo que también está salvado y con un ambiente muy revuelto en el vestuario. Zidane espera poner su once de gala, con las vueltas de Bale, Modric y Keylor.
El Real Madrid se aferra a la esperanza, a un pinchazo del Barcelona en Granada, que le permita cantar el alirón en su visita a Riazor, donde se encontrará al peor local del campeonato, un Deportivo salvado pero en una profunda crisis, con un ambiente muy revuelto en el vestuario. El conjunto blanco se encontrará a un Deportivo que selló la continuidad en la máxima categoría la semana pasada con su segunda victoria de 2016, 0-2 ante el Villarreal, y que ha puesto al descubierto todos los problemas que ha habido durante la temporada.
En las últimas horas, han salido jugadores a acusar a otros de falta de profesionalidad. El entrenador, Víctor Sánchez del Amo, ha repasado los casos de Luisinho y Lopo, que han sido apartados por él y sus ayudantes y ha criticado las informaciones negativas de la prensa. El representante del luso le ha acusado de querer destruir su carrera. Y con todo ese caldo de cultivo, llega el partido. Es una incógnita la respuesta que tendrá la afición en un estadio de Riazor que registrará una de las mejores entradas de la temporada, con mosaico inicial y el homenaje al exentrenador del Deportivo y Real Madrid Arsenio Iglesias en el descanso del choque.
En el césped, habrá una gran novedad, la presencia del lateral Manuel Pablo García, que jugará de inicio por las bajas de Juanfran Moreno y Laureano Sanabria, 'Laure', y que puede disputar los últimos minutos de su carrera. Además, Víctor recupera a Fernando Navarro y el internacional costarricense Celso Borges, que cumplieron sanción en el anterior compromiso, y tendrá que decidir si el futbolista americano regresa al once. En ataque, Lucas Pérez será una vez más la referencia y el mayor peligro de un Deportivo que no quiere repetir el histórico 0-8 que le endosó el mes pasado el Barcelona en el mismo escenario.
Mientras, el Real Madrid llega lanzado a Riazor, buscando su decimosegunda victoria consecutiva en Liga en una racha que le llevó de estar a trece puntos del líder, el Barcelona, a presionarle hasta la última jornada en la lucha por el título. Cumplido el primer objetivo marcado por Zinedine Zidane, superar en la clasificación al Atlético de Madrid, encara el reto mayor, acabar como campeón en el último capítulo del campeonato.
Un ojo en Riazor... y otro en Los Cármenes
Jugará con un ojo en Riazor y otro en Los Cármenes de Granada, aunque Zidane insiste en que sus jugadores deben centrarse en su partido para poder superar al Deportivo de la Coruña, y luego esperar noticias del Barcelona. Para ello recupera a gran parte de sus jugadores lesionados y salvo Lucas Vázquez, con un esguince de rodilla, podrá contar con todos.
Están recuperados Keylor Navas, Dani Carvajal, Luka Modric y Gareth Bale, aunque la cercanía de la final Liga de Campeones podría hacer que Zizou no forzase a todos. El que ya está al cien por cien, olvidada su lesión muscular, es Cristiano Ronaldo. En Riazor puede firmar su tanto 50 del curso y su deseo es sumar un buen puñado de goles para impulsar a su equipo y pelear con el barcelonista Luis Suárez hasta el último segundo por ser máximo goleador de la Liga.
La diferencia de cuatro dianas se antoja misión imposible, pero el portugués es capaz de todo. Todo indica a que Keylor regresará a la portería si Zidane no premia la brillantez de Kiko Casilla ante el Valencia para mantener al Real Madrid en el pulso por la Liga. Entre Danilo y Carvajal está la única duda en defensa. Isco sería el elegido si no se decide forzar a Modric y Bale volverá a completar la BBC.