Messi salva el primer 'match ball' del Mundial para Argentina
La albiceleste se impone a México con goles de Messi y Enzo Fernández y se jugará la clasificación con Polonia el próximo miércoles.
⚽Así vivimos la vital victoria de Argentina ante México en el Mundial de Qatar
Leo Messi apareció de manera salvadora para rescatar a su selección en un partido vital para seguir en el Mundial de Qatar. La albiceleste tendrá aún que ganar a Polonia en la última jornada para cerrar su clasificación a octavos, aunque este resultado le permite respirar después de unos días más que complicados en la concentración.
México planteó un partido muy intenso y físico, yendo a buscar a Argentina muy arriba y forzándola a cometer errores en salida. La primera parte se jugó prácticamente en el centro del campo, teniendo que venir Messi en muchas ocasiones muy abajo a recibir, alejándose muchísimo de la zona de peligro. Los futbolistas de ambos conjuntos eran conscientes de lo mucho que se jugaban y luchaban cada balón como si fuera el último.
A los que no vimos durante los primeros 45 minutos fue a los porteros. México intentaba salir rápido cada vez que robaba alto con balones a Alexis Vega e Hirving Lozano, pero apenas lograron conectar con ellos. Argentina, por su parte, tenía más la pelota, pero jugaba muy lejos del área y era incapaz de girar al equipo mexicano. Las únicas dos apariciones de la albiceleste por el área mexicana fueron a partir de los laterales, Montiel y Acuña, pero sin peligro alguno para Ochoa.
El guion no cambió en el inicio del segundo tiempo. Argentina salió muy nerviosa y el miedo y la tensión podía apreciarse en la cara de sus futbolistas. Fruto de esa tensión, vimos incluso al propio Messi lanzar muy mal una de esas faltas que para él son prácticamente un penalti.
México defendía bien, pero pasada la hora de partido se olvidó de una cosa: no darle espacio a Messi en la frontal. El argentino recibió un balón un poco por detrás de la media luna del área con tiempo suficiente para armar su zurda y batir a Ochoa con un disparo raso cruzado. La locura.
Argentina empezó entonces a jugar con el crono mientras Messi pedía cabeza a los suyos. A falta de cuatro minutos para el final, Enzo Fernández recogió un balón en el pico del área, encaró a un defensa y se abrió un hueco con una bicicleta para sacar un precioso disparo con rosca ante el que no pudo hacer nada Ochoa.
La albiceleste cerraba de esa manera un partido lleno de tensión, en el que incluso vimos a Pablo Aimar, ayudante de Scaloni, llorar en el banquillo tras el gol de Messi. Argentina respira y pone la vista en el encuentro ante Polonia del próximo miércoles, su segundo 'match ball' para estar en octavos de final.