Sabino Méndez: "Si no queremos ser gobernados por césares insoportables, dejemos de ver al adversario político con cuernos y rabo"

¿Estamos trasladándonos, moviéndonos de una democracia a una teocracia laica? Hoy en día en España se trata a los políticos, o bien como si fueran dioses, o bien como si fueran demonios.

A día de hoy, no hay un término intermedio a la hora de catalogar a las figuras políticas en cada opinión individual, siempre se tiende a sesgar hacia un extremo u otro, un hecho que los medios o los votantes lo utilizarían mayoritariamente. Ante esto, Sabino Méndez se pregunta ¿Por qué nos está pasando esto? Es algo inusual ya que estamos en un sistema democrático donde tendría que primar el debate y el razonamiento.

Bajo esta pregunta, vuelve al origen de todo, a los primeros humanos. "Yo creo que procede de una confusión que siempre se ha dado a los humanos y ya quejó a los antepasados en las cavernas" afirma, algo que sostiene por estudios ya realizados por Richard Darwkins, biólogo evolutivo, y ChristopherHitchens, escritor, sobre la confusión entre peligros con agente provocador y peligros sin agente provocador.

Este estudio demostraría la creación fantasiosa de nuestros ancestros por imaginar seres divinos o superiores en la mayoría de los aspectos de la vida. El ejemplo que expone Sabino Méndez son los agentes externos al salir de la caverna, había ocasiones en las que podían morir por un tigre, un animal diseñado para cazar; y por otra parte, esa muerte se podría producir por la caída de un rayo, algo que no está diseñado para la misma función que el tigre pero, por aquél entonces, no se sabía la diferencia. Con lo cuál, el resultado era la creación de divinidades para protegerse de esos agentes, una forma politeísta que posteriormente se englobó en una forma monoteísta.

Con esto, plantea la hipótesis de un paralelismo entre lo actual y esa tendencia mediante el caso de Montero y Rosell por la ley de 'solo sí es sí' y el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017, respectivamente. Estos peligros y sus consecuencias, provocarían una búsqueda de agente por parte de esos líderes políticos, que se asemejaría a los primeros seres humanos y les haría ser designados como el bien o el mal.

Sabino Méndez finaliza con una cita de Alfonso Pérez Rubalcaba: "Entre la legitimidad de las bases (de los partidos) y la de los órganos de gobierno (intermedios), siempre ganará el cesarismo", y apunta que la mejor opción para los próximos tiempos sería cambiar la consideración del adversario político como el malo.