OPINIÓN

Monólogo de Alsina: "Aldama mete al Gobierno en 'terra ignota'"

Carlos Alsina reflexiona en su monólogo sobre las declaraciones de Víctor de Aldama señalando a Koldo, Ábalos, Pedro Sánchez, ministros y altos cargos del PSOE, con quienes se reunió para ofrecerles negocios y pedirles adjudicaciones públicas.

Carlos Alsina

Madrid |

Es bastante más que una crisis. Es territorio desconocido. El gobierno, y el PSOE, han entrado en terra ignota. El problema, gordo problema, inesperadamente gordo, que desde ayer arrastran no es tanto, o no sólo, por lo que sucedió en el juzgado como por lo que sucedió después en la puerta de la prisión. Estos cinco segundos de declaración de Víctor de Aldama, enterado de lo que Sánchez había dicho, sobre él, un rato antes.

El problema para el gobierno, y para el PSOE, es que no saben qué tiene Aldama

Que no se preocupe, que va a tener pruebas. El problema para el gobierno, y para el PSOE, es que no saben qué tiene Aldama. Ahora ya el tiempo, y el goteo de revelaciones, lo maneja el amigo-conseguidor de Javier Hidalgo, Air Europa, contacto y gestor de Delcy Rodríguez, y corruptor, según declaración propia, de Koldo, de Ábalos y, nuevo actor señalado, de Santos Cerdán. Qué munición tiene Aldama.

El juez Pedraz, que lo mandó a prisión preventiva por el caso de los hidrocarburos, decretó ayer su excarcelación. Entiende el juez, compartiendo el criterio de la fiscalía, que la prisión ya no es necesaria porque no hay riesgo de fuga ni de destrucción de pruebas. Entienden el juez y la fiscalía que, al declararse corruptor y admitir sus delitos, Aldama está colaborando con la Justicia.

"Quien colabora con la Justicia tiene el apoyo del gobierno". ¿Y Aldama?

Aprovechemos para releer este mensaje que escribió el ministro Bolaños cuando el gobierno, hace veinte días, indultó al miembro de la trama Gürtel que tiró de la manta, José Luis Peñas. El mensaje dice: ‘Quien colabora con la Justicia tiene el apoyo del gobierno’. ¿Y Aldama?

¿Cuánto más va a poder, o querer, colaborar con la Justicia Víctor de Aldama? Se ha declarado corruptor y señalado como corrompidos a Koldo, Ábalos, el jefe de gabinete de María Jesús Montero y Santos Cerdán.

A Sánchez lo único que hizo fue desmentirle

Ocurre que a Pedro Sánchez, Aldama no le imputó ayer ningún acto delictivo. A Sánchez lo único que hizo fue desmentirle. Si el presidente sostuvo que jamás cruzó un palabra con Aldama y que nunca se vio con él, Aldama sostiene que fue Sánchez quien pidió conocerle, quien se hizo la foto en La Latina a solas y quien le agradeció las gestiones que estaba haciendo para conseguir un contrato ferroviario en México para empresas españolas.

Lo que sí habría hecho Sánchez es mentir cuando negó que hubiera hablado con él de nada

Quien convirtió haberse reunido con Aldama, incluso haber cruzado una simple palabra con él, en un elemento incriminatorio fue el presidente, con aquella declaración tan categórica de no he cruzado una palabra. Haber visto alguna vez a este ciudadano, o incluso haberse visto con él, no es, en sí mismo, indicio de delito alguno. Pero la forma en que Sánchez se refirió en su momento a la foto, y la forma en que ayer se refirió a Aldama, es lo que lleva a éste, según dice, a advertir de que va a enseñar más cosas. En efecto, si Sánchez quiso agradecer a Aldama unas gestiones tampoco habría incurrido, por ello, en delito alguno. Lo que sí habría hecho es mentir cuando negó que hubiera hablado con él de nada.

Esto sólo ha empezado

El problema que tienen el gobierno y el PSOE es que, escuchando a Aldama, queda claro que esto va a seguir. Que esto sólo ha empezado.

Aldama ya tiró de su manta. ¿Qué hace ahora el juez con todo lo que ha dicho?

Naturalmente sabe el juez, y sabe la fiscalía -como sabemos todos- que Aldama puede haber mentido. Naturalmente sabe el juez, y sabe la fiscalía -como sabemos todos- que Aldama puede haber dicho la verdad. O que puede haber mezclado verdades con medias verdades y con mentiras completas. Ni su testimonio, por sí solo, condena a nadie ni el juez Pedraz, al dejarle en libertad, está dando por cierto todo lo que Aldama dice. Pero ocurre que lo ha dicho. En el juzgado. Autoinculpándose. Y que ni el fiscal ni el juez del caso Koldo, ni las acusaciones particulares, pueden seguir ahora como si esta declaración no se hubiera producido.

Se seguirá investigando y se verá si los indicios de prueba ratifican lo que declara Aldama o lo desbaratan. O ratifican algunas cosas y desbaratan otras. Ese es el siguiente paso: Aldama ya tiró de su manta. ¿Qué hace ahora el juez con todo lo que ha dicho?

¿Ser delincuente equivale a no tener credibilidad?

La reacción del presidente, y del PSOE -previsible- ha sido negarle cualquier credibilidad al corruptor alegando que es un presunto delincuente. Más que presunto, confeso. Con lo que le gusta al gobierno la expresión, delincuente confeso, y esta vez no la ha usado.

Ahí pretende situar a la opinión pública el gobierno, teniendo que elegir entre creerle a Cerdán y Sánchez o creer a este personaje. Es una operación de contención de daños que ya usaron gobiernos anteriores cuando se vieron en apuros parecidos. Pero nunca es un gobierno, por muy aficionado que sea a emitir sentencias y declarar culpables, quien determina la veracidad de un testimonio.

Ahí pretende situar a la opinión pública el gobierno, teniendo que elegir entre creerle a Cerdán y Sánchez o creer a este personaje

¿Ser delincuente equivale a no tener credibilidad? Como en el gobierno hay dos jueces ministros, que lo expliquen ellos, si es que aún recuerdan algo de sus vidas anteriores. ¿A los delincuentes nunca hay que creerles? Margarita Robles, que vivió tan de cerca la investigación judicial (y periodística) sobre el terrorismo de Estado en tiempos de Felipe, ¿qué credibilidad tenían los delincuentes Amedo y Domínguez? ¿Les dio crédito Baltasar Garzón?

El ministro Óscar Puente, que demostró en su primera intervención parlamentaria de esta legislatura haber leído o visto Fariña: ¿tenía credibilidad Ricardo Portabales, narcotraficante y acusador de narcotraficantes? Juntar en una misma frase credibilidad y delincuente es juntar dos elementos que no van de la mano: ha habido delincuentes muy mentirosos y ha habido delincuentes que han cantado la traviata con un apego a la verdad digna de la mejor causa.

Nunca es un gobierno, por muy aficionado que sea a emitir sentencias y declarar culpables, quien determina la veracidad de un testimonio

Si haber delinquido hiciera imposible dar crédito a nada de lo que digas no habrían podido enarbolar el PSOE y sus socios las afirmaciones del comisario Villarejo como prueba de que hubo una policía patriótica en tiempos de Rajoy. O una operación del PP para neutralizar a Bárcenas. O un intento de silenciar a Corinna con dinero del Estado.

El caso Koldo, caso Aldama, caso Ábalos entra en tierra desconocida. El primer día de su nueva etapa se resume en estos diez segundos.